La Unión Europea logra lo que parecía imposible: el iPhone permitirá instalar aplicaciones fuera de la App Store

El infierno se ha congelado.

En los últimos años, la división de servicios de Apple ha crecido exponencialmente hasta convertirse en la segunda mayor fuente de ingresos de la compañía, solo por detrás de las ventas de iPhone.

La comisión de la App Store de Apple (un 15% si el desarrollador factura menos de 1 millón de dólares, y un 30% si factura más) es la gallina de los huevos de oro de este negocio. El truco es que iOS solo permite instalar aplicaciones a través de la App Store, por lo que todos los desarrolladores que quieren estar en el iPhone se ven sujetos a esta tarifa. Es un peaje de miles de millones de dólares que Apple ha defendido a capa y espada.

Pero como decíamos, el infierno se ha congelado.

Según un reportaje de Bloomberg, la exclusividad de la App Store se va a terminar. Y no porque Apple haya tenido un ataque repentino de generosidad, sino porque la Unión Europea va a endurecer su normativa.

Dice Bloomberg que ingenieros de software y empleados de la división de servicios de Apple están trabajando en una forma de eliminar estas restricciones de iOS para poder instalar aplicaciones desde fuentes alternativas a la App Store. El proyecto cuenta con grandes recursos dentro de Apple y está siendo liderado por Andreas Wendker, vicepresidente de ingeniería de software de la compañía, en colaboración con Jeff Robbin, jefe de ingeniería de servicios.

Sideloading, menos APIs privadas y abrir a terceros el NFC
Las fuentes de Bloomberg apuntan a que estos cambios estarán incluidos entre las novedades de iOS 17, la versión de iOS que saldrá en otoño del año que viene. Y aseguran que su alcance podría ir más allá de la App Store, dependiendo de cómo Apple acate la nueva normativa europea.

Los navegadores web de terceros disponibles en la App Store, como Chrome, Firefox, Opera y Edge, están obligados a usar WebKit, el motor de renderizado de Safari desarrollado por Apple. Según el plan para cumplir con la nueva normativa, Apple estaría considerando eliminar esa obligación.

De acuerdo con Bloomberg, Apple también trabaja en abrir algunas de sus APIs privadas para que los desarrolladores puedan aprovechar mejor el hardware de sus dispositivos, incluidas las cámaras y el chip NFC. Los usuarios de iPhone solo pueden usar Apple Pay dentro de la aplicación Wallet para realizar pagos contactless; quizá en el futuro puedan usar otras aplicaciones financieras.

Bloomberg también menciona una mayor apertura de la red Buscar (para localizar dispositivos perdidos), pero en cambio dice que Apple no está considerando integrar el protocolo RCS en su aplicación de Mensajes, ni ha tomado una decisión sobre cómo abrir iMessage a servicios de terceros.

Todos estos cambios estarían desviando recursos del desarrollo típico de una actualización de iOS, ya que deben estar listos antes de que empiece a aplicarse la nueva Ley de Mercados Digitales de la Unión Europea en 2024. Las normas más estrictas se aplican a las empresas de tecnología con valoraciones de mercado de al menos 75.000 millones de euros y un mínimo de 45 millones de usuarios mensuales dentro de la UE, y requieren que las empresas de tecnología permitan la instalación de aplicaciones de terceros y cambiar más fácilmente la configuración predeterminada de los dispositivos.

Gerard de Graaf, embajador de la UE en Silicon Valley, dijo en una rueda de prensa en el consulado irlandés de San Francisco: “Si tienes un iPhone, deberías poder descargar aplicaciones no solo de la App Store, sino también de otras tiendas de aplicaciones o de internet”. Apple lleva años enumerando los peligros del sideloading (la instalación de software desde fuentes alternativas a la App Store) en defensa de su negocio, especialmente en tribunales. De hecho, ganó una batalla legal contra Epic en la que el desarrollador de Fortnite exigía poder tener su tienda de juegos en iOS. Un tribunal dictaminó que el fabricante del iPhone no había violado las leyes antimonopolio de Estados Unidos, pero el malware, las violaciones a la privacidad y otras excusas se han ido desgastando con el tiempo, y la UE ha conseguido tumbar al gigante.

Parece que la App Store dejará de ser la única vía para los desarrolladores de aplicaciones que quieren estar en el iPhone, y aunque seguramente el sideloading vaya a ser algo minoritario en iOS (como lo es en Android), algunos usuarios y desarrolladores se beneficiarán enormemente de este cambio. Quién sabe, quizá acabe ocurriendo como en los sistemas de escritorio, y tiendas alternativas a la App Store, como Steam o Epic Games Store, lleguen al iPhone y se conviertan en servicios muy populares.