¿Es realista la idea de una Inteligencia Artificial todopoderosa como la de ‘Misión: Imposible’?

La última entrega de la franquicia “Misión: Imposible” presenta a una inteligencia artificial villana llamada Entidad. Espeluznante, ¿verdad?

Al igual que muchas IA de ficción, como Skynet en las películas de Terminator y HAL 9000 de “2001: Una odisea del espacio”, la Entidad no es buena.

Hay una carrera entre los buenos y los malos para tomar el mando de esta IA que todo lo sabe y que está fuera de control antes de que destruya el mundo de alguna forma no especificada.

Claro, claro, claro, la última “Misión: Imposible” tiene acrobacias y secuencias de acción increíbles. Me divertí viéndola.

Pero mi cerebro obsesionado con la tecnología se preguntaba: ¿Cómo de plausible es la Entidad? ¿Cómo se compara con otros superordenadores malos de la cultura popular? ¿Y hasta qué punto debemos tomarnos en serio la IA falsa en las películas?

Para explorar estas cuestiones, hablé con Alex Hanna, director de investigación del Distributed AI Research Institute y copresentador del podcast “Mystery AI Hype Theater 3000″. (A continuación, una versión editada y condensada de nuestra charla).

Tal vez parezca una tontería mantener conversaciones profundas sobre los villanos de las películas de IA, pero la ficción importa. Las formas de vida artificial inventadas desde “Frankenstein”, las novelas de robots de Isaac Asimov y los cómics de Iron Man han influido en nuestras creencias sobre la IA en el mundo real.

Este artículo incluye un spoiler obligatorio: se comentan algunos detalles de la trama de “Mission: Imposible – Dead Reckoning, Primera Parte”.

Pero leer esto no te arruinará la película. La trama no es lo importante. (Ann Hornaday, del Washington Post, le dio tres de cuatro estrellas).

—¿Retrata El Ente con precisión las capacidades reales de la IA?

—Hanna: No. Es absurdo.

—¿Por qué? ¿Qué tiene de inverosímil la Entidad?

—La idea de que la Entidad pueda piratear básicamente cualquier sistema electrónico -que pueda escuchar y ver todo lo que ocurre en el mundo y aprender de ello- es bastante ridícula. Ninguna de las tecnologías de IA actuales puede hacer esto de forma autónoma.

La Entidad tiene tal capacidad de previsión que puede predecir al segundo quién va a hacer qué en el futuro y jugar con todas las posibilidades con un ingenio similar al humano. Eso no es posible.

La Entidad también tiene intención. Ethan Hunt [el personaje de Tom Cruise] quiere apagar o controlar la Entidad, y es como los robots de la ficción de Isaac Asimov, en el sentido de que intenta protegerse a sí misma.

Mi colega Emily M. Bender dice que estas máquinas no entienden nada. La comprensión es exclusiva de los seres sensibles.

—¿Hay tecnologías de IA más realistas en esta película?

—Sí. El reconocimiento facial es tan habitual en esta película que ni siquiera se considera IA. Lo utilizan las agencias de inteligencia estadounidenses, la policía italiana y el equipo de Hunt.

(Paramount Pictures)

Las descripciones coinciden con muchas representaciones del reconocimiento facial en los medios de comunicación populares: que el software tiene visión real y puede identificar a un terrorista. Pero, en el mundo real, esta tecnología falla constantemente.

También hay un momento en la película “Misión: Imposible” en el que [un personaje llamado Benji Dunn] va en un coche autoconducido y salta al asiento del copiloto. Se pone el cinturón de seguridad como diciendo: “No me fío de esto”.

Se trata de una IA que todavía es cuestionable, y los creadores de la película tuvieron la suficiente reflexión como para hacer que un personaje se sintiera inseguro al respecto. Estuvo genial.

—¿Hay ejemplos de otras IA en medios populares que le parezcan acertados?

—No.

El eterno problema es que la tecnología y la informática se presentan en los medios populares como magia.

Incluso en la película “Mission: Imposible”, la idea es que una vez que los buenos consiguen una clave para acceder al código fuente de la Entidad, la IA puede ser controlada. Eso es un malentendido. Incluso si tuvieras el código fuente real de una IA, no te diría lo que necesitas saber.

También necesitarías los pesos del modelo en una red neutral para poder replicar cualquiera de sus decisiones. Habría que saber a qué datos tiene acceso.

—¿Le gusta algún entretenimiento relacionado con la tecnología?

Misión imposible 7 (Paramount Pictures)Misión imposible 7 (Paramount Pictures)

—Me encanta Data [el personaje androide] en “Star Trek” porque intenta ser más humano para mejorar sus relaciones con sus compañeros de tripulación, al contrario que su gemelo malvado, Lore, que quiere matar humanos y acumular poder.

La película “Hackers” no es realista, pero me encanta por el variopinto grupo de personas que intentan acabar con una megacorporación. Además, un joven Jonny Lee Miller y Angelina Jolie son divertidos.

—Todo esto es ficción. ¿Por qué importan las representaciones falsas de la inteligencia artificial?

La ciencia y la ciencia ficción se crean mutuamente.

Las representaciones de la IA pueden influir en cómo pensamos sobre la IA del mundo real porque pueden asignar a esos modelos de la vida real demasiada agencia o poder.

Pero la IA del mundo real es mucho más limitada y destruye vidas con mucha menos carnicería pública; por ejemplo, el reconocimiento facial y el software policial predictivo.

—¿Cree que el miedo actual de algunos tecnólogos a que la IA provoque la extinción humana está influido por las máquinas asesinas de ficción?

Tom Cruise es de los pocos actores que realizan sus propias escenas de acción. (Empire)Tom Cruise es de los pocos actores que realizan sus propias escenas de acción. (Empire)

—No lo sé. El miedo a las entidades artificiales fuera de control tiene una larga historia. El monstruo de Frankenstein es un cuento con moraleja sobre la arrogancia del hombre.

—Si tuviera que escribir un villano ficticio de IA para una película, ¿cuál sería?

—Podrían ser sistemas de IA utilizados como garrote por los jefes para romper la espalda a los trabajadores. Ése es el tipo de usos de la IA de los que hablan ahora los sindicatos de guionistas y actores de Hollywood.

Esas representaciones se parecerían más a películas laborales que a “Misión: Imposible”. Pero yo la vería.