Un miembro de la Conferencia Consultiva de China ha propuesto reducir la edad legal para el matrimonio a 18 años y eliminar las limitaciones en la cantidad de hijos por familia. Esta iniciativa busca aumentar la tasa de natalidad y enfrentar la crisis demográfica que atraviesa el país.
La propuesta fue presentada por Chen Songxi, miembro de la Academia China de Ciencias, y será uno de los temas a debatir en las Dos Sesiones, los encuentros anuales de la Asamblea Nacional Popular (ANP) y la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPCh), que se llevarán a cabo la próxima semana.
Actualmente, las leyes chinas permiten que los hombres contraigan matrimonio a partir de los 22 años y las mujeres desde los 20, además de autorizar un máximo de tres hijos por familia. Chen destacó que este cambio permitiría ampliar el grupo de personas en edad reproductiva, lo que ayudaría a contrarrestar la preocupación creciente por el envejecimiento poblacional y la baja natalidad, según informó el diario oficial Global Times.
El académico aclaró que el objetivo no es imponer el matrimonio temprano, sino ofrecer una mayor libertad de elección, en línea con las políticas de otros países en cuanto a la edad mínima para casarse.
Datos oficiales señalan que en 2024 se registraron 6,1 millones de matrimonios en China, la cifra más baja en más de cuatro décadas.
Además de proponer un cambio en la edad legal para el matrimonio, Chen sugirió una reforma más amplia de la legislación sobre población y natalidad. En este sentido, planteó modificar el nombre de la actual «Ley de Planificación Familiar y Población» de 2021 por «Ley de Potenciación de la Población y la Natalidad». Esta nueva normativa eliminaría cualquier límite en el número de hijos y ofrecería incentivos como ayudas económicas mensuales y servicios médicos para cada niño hasta una edad determinada.
A pesar de los esfuerzos del gobierno chino por fomentar los nacimientos, las medidas adoptadas hasta ahora no han logrado un incremento significativo, especialmente en las zonas urbanas.
Chen resaltó que el periodo entre 2025 y 2035 será fundamental para implementar estos cambios, ya que se calcula que durante esos años el número de mujeres en edad fértil se mantendrá entre 290 y 310 millones. Las autoridades también tienen previsto realizar encuestas para comprender las intenciones de natalidad y ajustar las políticas de apoyo según las necesidades de la población.
El envejecimiento de la población es otra preocupación importante para el gobierno chino. En 2024, el 15,6 % de los habitantes tenía 65 años o más, y se estima que para 2031 este porcentaje superará el 20 %. Si la tendencia continúa, en 2050 casi un 30 % de la población será mayor de 65 años, lo que podría tener un fuerte impacto en la economía y en la disponibilidad de mano de obra.