Un grupo de investigadores de Georgia han descubierto que los gorilas de varios zoos de Estados Unidos han desarrollado una especie de sonido especial, a medio camino entre tos y estornudo, para llamar la atención de los cuidadores del zoo cuando tienen hambre.
“Estábamos observando los gorilas dentro de sus recintos y notábamos una vocalización extraña que tenía lugar en momentos específicos”, dijo Roberta Salmi a Gizmodo por teléfono. Salmi es antropóloga biológica de la Universidad de Georgia y autora principal del estudio, publicado en Plos One, en el que se detalla este nuevo truco vocal. “Estudio las civilizaciones de gorilas occidentales en la naturaleza, y el trabajo que estábamos observando no era algo que hubiera escuchado antes”.
Salmi y la cuidadora del zoo Jodi Carrigan comenzaron a sospechar que esta vocalización inusual era un intento de los gorilas de llamar la atención de los humanos que estaban cerca, sobre todo para expresarles sus ganas de comer. Los investigadores denominaron esta especie de llamada como “snough”, un acrónimo entre las palabras inglesas de “estornudo” y “tos”, e idearon un experimento para explorar por qué y cuándo estos gorilas en cautividad la utilizaban. Salmi, Carrigan y una ayudante de Salmi, Monica Szczupider, utilizaron una videocámara y un micrófono para estudiar el comportamiento de ocho gorilas del zoológico de Atlanta bajo tres situaciones.
“En una de las situaciones, les presentamos a los gorilas solo comida. En el segundo caso presentamos al gorila solo el cuidador. Y en el tercer caso mostramos al cuidador con comida en las manos”, explicó Salmi. Los cuidadores del zoo del primer y tercer caso se alejaron de la jaula para asegurarse de que los gorilas tuvieran que llamar su atención. “Lo que vimos fue que cuando la tercera situación se cumplía, los gorilas comenzaban a emitir esta especie de extraña llamada. Es una especie de mezcla entre tos y estornudo, que hacen con la boca abierta. Es algo bastante raro en las estructuras de los gorilas”.
La mitad de los gorilas observados en el zoológico de Atlanta hacían este ruido durante las pruebas del proyecto, y Salmi dijo que lo seguían haciendo en dirección al cuidador hasta que recibían una respuesta. El equipo nunca observó a los gorilas haciendo esta señal entre sí, lo que sugiere que solo la usan para llamar la atención de los humanos.
Ese último hallazgo intrigó a Simone Pika, una investigadora que estudia cognición y comunicación animal en la Universidad de Osnabrück en Alemania. Pika, que no participó en este paper, dijo que “es interesante por qué los gorilas no usan estos sonidos cuando se comunican con sus congéneres, y sería genial diseñar un experimento en el que los gorilas necesiten cooperar con otro miembro del grupo para lograr un objetivo (por ejemplo, obtener comida) y probar así si usarían los mismos sonidos o incluso serían capaces de inventar otros adicionales”.
Pero antes de nada, ¿por qué este sonido en particular? Los gorilas podrían estar imitando sonidos relacionados con la salud. “Este sonido llama especialmente la atención de los cuidadores, porque es su trabajo cuidar de su salud, así que ante cualquier tipo de señal de una posible enfermedad, el humano va a ver lo que está pasando”, especuló Salmi.
Además de sus observaciones en el zoo de Atlanta, Salmi y sus compañeras recogieron fotos, vídeos y testimonios de los cuidadores de gorilas de otros zoológicos. Descubrieron que 18 de los 39 encuestados habían notado la presencia de este sonido. “La parte más interesante es que, dado que algunos de esos gorilas fuera del zoo de Atlanta no habían tenido ninguna interacción con esos otros gorilas, es posible que esta llamada haya sido inventada varias veces y no solo por los gorilas de Atlanta”, señaló Salmi.
Curiosamente, tres de las gorilas hembras del zoo de Atlanta que realizan esta llamada están emparentadas (Sukari y Kudzoo son hermanas, mientras que Mary es la hija de Kudzoo) y esto podría ser evidencia de que los gorilas aprenden la llamada los unos de los otros. “Este tipo de llamada se puede aprender durante la ontogenia”, dijo Salmi. “Por eso, cuando las personas son pequeñas y están aprendiendo cuándo realizar llamadas concretas, pueden aprender esta nueva llamada y usarla”. Salmi nos contó que Mary había sido trasladada a otra institución y que otros gorilas podrían haber aprendido este sonido de ella.
Otras especies también pueden tener llamadas específicas para los humanos. Los gatos, por ejemplo, parecen maullar sobre todo para comunicarse con nosotros. Eso sí, los gatos han sido domesticados durante milenios, algo que no ocurre con los gorilas, lo que hace que este hallazgo sea aún más intrigante.