Trump acusa a Biden de darle un impulso a Maduro cuando ya estaba “listo para irse”

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró este viernes que el mandatario venezolano, Nicolás Maduro, estaba «preparado para irse», pero que su sucesor, Joe Biden, «lo fortaleció».

Trump realizó estos comentarios durante un encuentro en la Casa Blanca mientras se refería a la compra de petróleo venezolano por parte de empresas estadounidenses. El crudo de Venezuela es especialmente pesado y se procesa en refinerías ubicadas en Houston, Texas.

El expresidente criticó la decisión de Biden de permitir que Venezuela continúe exportando petróleo a Estados Unidos, a pesar de que el país norteamericano posee «el mejor crudo del mundo». Trump hacía referencia a la decisión del gobierno de Biden, tomada en noviembre de 2022, que permitió a la petrolera estadounidense Chevron ampliar su producción en Venezuela, lo que implicó un retroceso en las sanciones impuestas durante la presidencia de Trump.

En sus comentarios, Trump reiteró que Maduro «estaba listo para irse», pero que Biden «lo fortaleció». Además, mencionó: «Tienes a un tipo sentado ahí con mucho petróleo. Esa no es una buena situación, pero estamos teniendo conversaciones sobre eso». A continuación, agregó: «Podemos hacer que Venezuela vuelva a ser fuerte».

A finales de enero, Trump ya había expresado a los medios en la Casa Blanca que no permitirá que se compre petróleo venezolano, como hizo el gobierno de Biden. «Biden fue y compró millones de barriles de petróleo. No voy a permitir que algo tan estúpido vuelva a ocurrir», afirmó en ese entonces.

El republicano también reforzó esta postura el 18 de febrero en una rueda de prensa en Florida, donde aseguró que estaba considerando suspender la licencia que permite a Chevron operar en Venezuela, señalando que no entendía por qué el país sudamericano recibe «miles de millones» de dólares por dicha operación.

La licencia otorgada a Chevron ha sido objeto de críticas por parte de Marco Rubio, secretario de Estado de EE.UU., quien considera que esta medida constituye una importante fuente de financiación para el gobierno de Maduro, a quien Washington no reconoce como vencedor legítimo de las elecciones de julio de 2024.