La propuesta del gobierno canadiense de establecer una oficina de coordinación de ayuda internacional para la policía de Haití ha generado un fuerte rechazo en la República Dominicana. Aunque las autoridades dominicanas han descartado la posibilidad, persisten las dudas sobre las verdaderas intenciones de Canadá.
Ante la condena generalizada de estos planes, anunciados por la ministra de Relaciones Exteriores de Canadá, Mélanie Joly, el gobierno de Luis Abinader se vio obligado a desestimar completamente la idea.
De hecho, han afirmado que no han discutido, acordado ni otorgado autorización para la instalación de dicha oficina.
El canciller dominicano, Roberto Álvarez, dejó claro que el gobierno no ha dado su autorización para la instalación de esa oficina en territorio dominicano por parte de Canadá.
Por su parte, el vocero del Gobierno y director de Comunicación de la Presidencia, Homero Figueroa, reafirmó que el país no ha aceptado ni aceptará en el futuro ninguna iniciativa que comprometa la soberanía de República Dominicana.
Según el periódico El Día, el pasado martes 13 de junio, la embajada de Canadá en Santo Domingo envió una nota diplomática al Ministerio de Relaciones Exteriores, informando al gobierno dominicano su interés en establecer una oficina de asistencia en seguridad para Haití.
En dicha comunicación, la embajada solicitaba la autorización del Gobierno de la República Dominicana para establecer una estructura de coordinación liderada por Canadá en la ciudad de Santo Domingo, según el documento fechado el 13 de junio, según el tabloide capitalino.
El 2 de abril de este año, el presidente Luis Abinader mantuvo una conversación telefónica con el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, en la que abordaron el tema haitiano.
Seguido a esto, Canadá emitió una declaración explicando haber tratado con Abinader la necesidad de ayudar a abordar la crisis actual en Haití y el compromiso de apoyar a la policía haitiana, para restablecer la paz y la seguridad.
También destacaron la importancia de la cooperación continua entre Canadá y República Dominicana y la comunidad internacional, para apoyar a Haití.
La primera semana de junio, Abinader participó en una reunión con los miembros de la Comunidad del Caribe (Caricom), celebrada en Bahamas, donde se dieron citas los líderes del Caribe, incluyendo a la vicepresidenta de EE. UU. Kamala Harris.
Allí se trató, entre otros temas, la crisis política y de inseguridad que vive Haití. Por otro lado, se conoció de que en una reunión celebrada en Canadá con países de la región, donde participó un representante dominicano, se trató el tema haitiano y Canadá se refirió al interés de establecer una célula para mejorar la coordinación y movilización de los esfuerzos internacionales en asistencia de seguridad, trabajando en conjunto con la policía de Haití
Esto está explicado en una nota emitida el pasado 15 de junio por el gobierno canadiense, pero en esta no se habla sobre la instalación de una oficina en República Dominicana, ni en Haití.
15 de octubre de 2022, los gobiernos de Estados Unidos y Canadá emitieron un comunicado anunciando la llegada a Haití de aviones militares de esos países, para transferir al director general de la Policía de Haití “equipos de seguridad vitales adquiridos por el gobierno haitiano, incluidos vehículos tácticos y blindados, y suministros”.
El documento indica que Estados Unidos y Canadá “mantienen su compromiso de apoyar el trabajo de la PNH de proteger y servir al pueblo haitiano”, y que “en coordinación con colaboradores internacionales, nuestros gobiernos están trabajando con colaboradores haitianos para fortalecer la capacidad de Haití para capacitar a más oficiales de policía y mejorar las operaciones de las fuerzas del orden público”.
Desde la presidencia de la República, hasta líderes políticos, legisladores y entidades de la sociedad civil han manifestado su rechazo a la instalación de una oficina de Canadá en el país que coordinar ayuda a la policía de Haití.
Ayer, un día después de darse a conocer la noticia, una de las primeras voces en negar la información fue el canciller Roberto Álvarez que, a través de su cuenta de Twitter, aclaró la posición oficial del gobierno.
“El Gobierno Dominicano confirma que no ha discutido, acordado o concedido autorización alguna para la instalación en nuestro territorio de una oficina para coordinar apoyo a la Policía Nacional Haitiana, como indica una información de un medio canadiense”, escribió Álvarez.
Poco después, el vocero de la Presidencia, Homero Figueroa, ratificó esta declaración del canciller: “Como vocero del presidente Luis Abinader, y como afirmara el Canciller, nuestro país no ha aceptado ni aceptará en el futuro ninguna iniciativa que afecte la soberanía dominicana. Nuestra política con respecto al tema se mantiene invariable”.
El candidato presidencial del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Abel Martínez, tuiteó: “La comunidad internacional debe entender, de una buena vez, que las soluciones a la crisis de Haití deben ejecutarse en su propio territorio y dentro de sus fronteras. Rechazamos las pretensiones de Canadá de instalar oficinas en República Dominicana para, alegadamente, coordinar la ayuda al vecino país. ¡Que las instalen en Haití!”.
El vocero del PLD en el Senado, Yván Lorenzo, alertó de que “la soberanía nacional está en peligro, ante un gobierno entreguista”.
El vocero del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) en el Senado, Rogelio Genao, comentó que “la posición del PRSC es clara y muy precisa. Queremos que la comunidad internacional vaya en auxilio de Haití, que lo pacifique y asista. Pero las soluciones de Haití tienen que hacerse en Haití y desde Haití. Canadá debe establecer depósitos y sus programas en territorio Haitiano”.