La Sociedad de Cardiología ha señalado que hay una gran cantidad de personas jóvenes que no están participando en actividades físicas.

La presidenta de la Sociedad Dominicana de Cardiología, Rosa Noemí Cueto, reiteró este jueves que las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte a nivel mundial y que un chequeo preventivo una vez al año es vital para detectar algún fallo eléctrico o congénito en el corazón.

«La gente joven, cada vez, utilizan más los hábitos tóxicos: utilizan hookah, vape, todo tipo de tabaco (de manera electrónica y de manera convencional), también el sobrepeso, la obesidad cada vez es mayor en nuestro medio, podemos ver a mucha gente joven que no está haciendo ejercicios«, afirmó la especialista.

Cueto indicó que hay que incentivar un estilo de vida saludable «para mejorar la salud cardiovascular y prevenir desenlaces fatales». Recomendó chequeos preventivos anuales, aún el paciente no tenga factores de riesgo.

Con relación a la muerte súbita en personas jóvenes, la especialista se mostró a favor de la realización de necropsias para determinar la causa real del fallecimiento.

Los pacientes hipertensos y los diabéticos tienen gran posibilidad de desarrollar un infarto porque en ellos, la enfermedad arteriosclerótica, que causa el daño en las arterias, principalmente en las coronarias, sí puede ser una causa de muerte.

La doctora explicó que el calor y la sudoración afectan el humor, complican situaciones estresantes y un mal manejo de la hidratación lleva a jóvenes y mayores a la descompensación.

«Es irritante, el calor, los apagones», aseguró.

«Los calores no son nada bueno porque en el fondo lo que hacen es provocar vasodilatación y pérdida de fluidos y eso puede producir problemas en la regulación del metabolismo y en los sistemas de compensación que tenemos de la tensión arterial», agregó Andrés Íñiguez, presidente de la Fundación Española del Corazón.

Al preguntarle sobre la relación entre las vacunas COVID-19 y los infartos, Íñiguez aseguró que «no hay que generar alarmas innecesarias, no hay ninguna evidencia de que haya un aumento significativo de la mortalidad en personas jóvenes«.

Íñiguez y Cueto firmaron un convenio de cooperación con la finalidad de que las instituciones que presiden trabajen en conjunto para la prevención cardiovascular y ser más «conscientes del impacto tan negativo que tienen las enfermedades cardiovasculares y la necesidad de promover salud».