Según fuentes del periódico, el presidente chino no se apresura a verse cara a cara con su homólogo estadounidense y dio a entender que EE.UU. primero debe bajar de tono.
RT.-El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, le propuso al mandatario de China, Xi Jinping, celebrar su primera cumbre cara a cara, pero no logró el visto bueno de su homólogo durante la conversación telefónica de la semana pasada, reporta Financial Times, que ha hablado con funcionarios norteamericanos bajo condiciones de anonimato que estarían al tanto del asunto.
Sin embargo, la Casa Blanca y el propio presidente han desmentido los supuestos hechos expuestos en el artículo. Asimismo, Biden aseguró que no es verdad que el presidente chino rechazara su propuesta de verse en la cumbre, mientras que el asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, declaró que «esto no es un retrato exacto de la llamada». Sin embargo, una fuente de Reuters informada sobre aquel contacto telefónico afirmó que el reporte de Financial Times era preciso.
Según el periódico, en lugar de convenir en la necesidad de reunirse, Xi Jinping exigió que la Administración de Biden bajara de tono en sus relaciones con Pekín, al que suele criticar por la supuesta opresión de la minoría musulmana uigur, políticas represivas contra la oposición en Hong Kong y actividades militares en las inmediaciones de Taiwán. El Gobierno chino, a su vez, acusó a EE.UU. de interferir en sus asuntos internos.
Una de las fuentes señaló que Biden tampoco esperaba una respuesta inmediata, ya que había mencionado la celebración de la cumbre como una de las varias posibilidades en el marco del desarrollo de las relaciones bilaterales con Pekín, mientras que otra persona familiarizada con la conversación indicó que tenían la impresión de que el presidente chino no quería comprometerse en esos momentos.
Otro interlocutor del periódico contó que en la Casa Blanca atribuyeron la negativa de Xi Jinping en parte a las preocupaciones por el covid-19, pues el mandatario chino no ha abandonado su país desde principios del año pasado después de su visita a Myanmar justo antes de la pandemia.