Hace aproximadamente un mes el telescopio espacial James Webb puso su ojo sobre Saturno con la intención de estudiar sus anillos. El resultado ha sido esta espectacular fotografía que consiguió captar la NIRCam, la cámara del telescopio que observa el universo en el espectro infrarrojo cercano.
Saturno luce muy oscuro en la longitud de onda infrarroja que mide el telescopio, puesto que el metano absorbe casi toda la luz solar que cae sobre la atmósfera, explicaba la NASA en un comunicado. Por el contrario, los anillos de hielo del planeta se muestran bajo un halo brillante que le da a la fotografía un aspecto único.
Esta nueva imagen forma parte del programa 1247 de observación de tiempo garantizado del Webb, un proyecto diseñado para probar la capacidad del telescopio para detectar lunas débiles alrededor del planeta y sus anillos.
Varias de las lunas de Saturno (Encélado, Dione y Tetis) se pueden ver en el lado izquierdo de la fotografía, mientras que el lado derecho podemos ver con claridad la División de Cassini, a separación que hay entre los anillos A y B de Saturno. La División Cassini es la separación más grande que hay dentro del sistema de anillos de Saturno y tiene unos 4800 km de anchura.
Curiosamente, el telescopio Webb estuvo ya estudiando Encélado —la luna de Saturno— el pasado mayo, donde descubrió una gran columna de vapor de agua saliendo del polo sur de la luna. Encélado es uno de los lugares de nuestro Sistema Solar donde los astrónomos albergan más probabilidades de que exista vida, ya que cuenta con océanos de agua líquida bajo su superficie.
Todas estas observaciones del telescopio Webb podrían ayudar a los científicos a hacerse una imagen más completa de Saturno y de su pasado geológico.