El precio del petróleo es un importante factor para anticipar cómo se comportará la economía global. Los líderes mundiales esperan para este 2023 una recesión y en parte es porque se cree que el precio del petróleo va a subir. Pese a los intentos de estabilizar el mercado y hacer equilibrios con las reservas, las perspectivas no están claras.
Los últimos meses han supuesto un respiro para el precio del petróleo, pero todos los analistas coinciden en que durante 2023 va a subir de precio. Los países de la OPEP+ han optado por limitar la producción e intentar contener los precios por debajo de los 100 dólares el barril, como por ejemplo con el tope al precio máximo del petróleo ruso.
Es algo que han conseguido temporalmente, pero están viendo que los países que no pertenecen a la OCDE (por ejemplo China, India y Oriente Medio) sí están demandando más petróleo. A pesar de que nos acercamos a una recesión, todavía hay mercados donde el consumo va al alza.
«Lo que probablemente ocurra es que veremos alteraciones en los próximos meses y, como consecuencia, probablemente los precios del petróleo aumentarán de nuevo en las próximas semanas», respondía el analista Jorge León, vicepresidente de Rystad Energy. Está por ver hasta qué punto escalarán y si se quedarán alrededor de los 80-90$/barril como apuntan los futuros o se dispararán más.
Todas las miradas apuntan a China. Una vez sus fábricas han vuelto a la actividad y se están levantando las restricciones por el coronavirus, la economía global está pendiente de cómo de rápida va a ser la reapertura y hasta qué punto impactará el auge de la demanda por parte de China. Hasta ahora el gigante asiático no necesitaba tanto petróleo, pero eso puede cambiar rápidamente en 2023.
El último informe de la OPEC sobre la situación económica de China ha hecho subir el precio del barril, superando los 85 dólares.
«Arabia Saudita no va a permitir que el Brent se quede en los 75 dólares el barril», explica Scott Sheffield, consejero delegado de Pioneer Natural Resources. «No hay liquidez en el mercado», apunta el experto, que cree que al menos el barril superará los 80 dólares y podría subir por encima de los 100 dólares con facilidad.
En el foro de Davos, el príncipe saudí Faisal bin Farhan Al Saud ha afirmado que su país, el principal exportador de petróleo del mundo, tiene la responsabilidad de aportar estabilidad al mercado y ha mostrado su apoyo a la OPEC+ de contener el precio. Se da la situación que ellos también son los primeros interesados en que sus reservas no se agoten más rápido de lo deseado.
Las acciones de Exxon, Marathon, Hess, Occidental y Schlumberger, las cinco mayores petroleras del mundo, crecieron un 87%, mientras que el índice S&P 500 cayó un 20%. Mientras para muchas empresas el año pasado fue muy duro, para las petroleras fue un año de récord, impulsado por la liberación de reservas estratégicas en EEUU y el elevado precio anterior.
Los analistas de Goldman Sachs y Morgan Stanley esperan otra subida del petróleo, calculando que el precio podría situarse en los 110 dólares a mediados de año. Hasta ahora el dólar ha estado muy fuerte, pero la moneda estadounidense podría debilitarse, lo que conlleva un incremento del precio del barril en su moneda.
Si la recesión impacta con fuerza en la economía global, el precio del petróleo no debería subir tanto. Si por el contrario la economía se muestra más resistente y fuerte, es posible que el petróleo suba con más fuerza.
Hablamos de la demanda global, pero con el petróleo la parte de la oferta es cada vez más relevante. El año pasado la Administración Biden decidió liberar reservas estratégicas y para este 2023 Biden ha sugerido que podría volver a liberar reservas, lo que podría ayudar a contener los precios en caso de escalada. Ahora mismo las reservas de EEUU son de unos 371 millones de barriles Brent, el volumen más bajo desde 1983.
La Agencia Internacional de la Energía avisa: gastaremos más que nunca. La IEA ha publicado hoy su último informe sobre el mercado del petróleo y avisa que aunque se suministrará una cantidad récord en 2023, no será suficiente para abastecer la demanda.
Las proyecciones apuntan a un incremento de la demanda hasta los 101,7 millones de barriles brent al día, mientras que la oferta se quedará en 101,1 millones. La demanda subirá en 1,9 millones al día, mientras que la oferta lo hará solo en 1 millón. Previsiones no muy optimistas de cara a intentar predecir el precio del petróleo.