El papa Francisco hizo un llamado a combatir la violencia contra las mujeres con una acción educativa que ponga en el centro a la persona y su dignidad. En un mensaje en el Día Internacional contra la Violencia Machista, el pontífice condenó la violencia hacia las mujeres, describiéndola como una «mala hierba venenosa» que afecta a la sociedad y que debe ser erradicada desde sus raíces.
El papa instó a abordar las causas profundas de la violencia de género, que a menudo se basan en prejuicios y desigualdades de género. Hizo hincapié en la importancia de la educación que promueva el respeto y la dignidad de cada persona como una forma de combatir esta violencia.
Este mensaje llega en un momento en que Italia, al igual que otros países, enfrenta un aumento en los casos de violencia contra las mujeres, lo que ha generado una mayor conciencia y movilización para abordar este problema. El papa también llamó a los periodistas católicos a tratar con respeto las historias y experiencias de las víctimas de violencia de género en lugar de centrarse en noticias sensacionalistas.
El pontífice ha sido un defensor de los derechos de las mujeres y ha hablado en varias ocasiones sobre la importancia de combatir la violencia de género y promover la igualdad de género en la sociedad.