Desde la perspectiva de Estados Unidos, el encuentro entre Vladimir Putin y Kim Jong-un refleja su situación.

Según Estados Unidos, la próxima reunión entre Vladimir Putin y Kim Jong-un en Rusia puede ser interpretada como un gesto en el que Putin está buscando ayuda de manera desesperada. El portavoz del Departamento de Estado de EE. UU., Matthew Miller, declaró que ven esta reunión como una especie de solicitud de ayuda por parte del presidente ruso.

Kim Jong-un se encuentra realizando su primer viaje al extranjero desde 2019, y el Kremlin ha respaldado su visita a Rusia, señalando que ambos líderes se reunirán posiblemente en Vladivostok, en el Lejano Oriente ruso. Estados Unidos está siguiendo de cerca el resultado de esta reunión y ha advertido a Corea del Norte sobre las consecuencias de suministrar armamento a Rusia destinado a la guerra en Ucrania.

La Casa Blanca ha instado a Corea del Norte a no proporcionar ni vender armas a las Fuerzas Armadas de Rusia, y ha recordado a Corea del Norte su compromiso público de no hacerlo. Estados Unidos está preocupado por un posible acuerdo de armas entre Rusia y Corea del Norte, aunque no tiene información sobre cuándo o dónde se llevará a cabo la reunión entre Kim y Putin.

Tanto el Kremlin como la agencia estatal norcoreana han confirmado que Putin y Kim se reunirán esta semana, y se especula que esta reunión podría implicar un acuerdo de suministro de armas que permita a Rusia obtener material al que no tiene acceso debido a las sanciones internacionales relacionadas con su invasión de Ucrania.

(Con información de EFE y Europa Press)