El gobernador de Maryland, Wes Moore, anunció que se inició el proceso de corte del puente Francis Scott Key, que colapsó el pasado martes en Baltimore, con el objetivo de removerlo de manera segura. Este proceso comenzó por la parte superior del lado norte del puente, utilizando equipos especializados de demolición. La intención es abrir un canal temporal restringido para facilitar el paso de embarcaciones alrededor del sitio del colapso, aunque se prevé que este trabajo tome tiempo.
Las labores de remoción cuentan con el apoyo de una grúa gigante, la más grande en la costa este de Estados Unidos, que llegó a Baltimore el viernes. Esta grúa, junto con otras siete grúas flotantes, 10 remolcadores, nueve barcazas, ocho buques de salvamento y cinco barcos de la Guardia Costera, participará en la recolección de escombros del puente.
Antes de iniciar la remoción, se llevó a cabo una evaluación de los escombros para determinar cómo serán cortados y levantados por las grúas. Esta fase es crucial para acelerar la recuperación una vez completada.
El colapso del puente ha bloqueado el acceso al puerto de Baltimore, lo que ha tenido efectos devastadores para la economía local y nacional. En respuesta, la Administración de Pequeños Negocios ha puesto en marcha un programa de préstamos a bajos intereses para pequeñas empresas en varias áreas afectadas.
Actualmente, 377 personas están involucradas en las operaciones de respuesta, y se espera que esta cifra aumente. El «Comando Unificado» está trabajando en colaboración con empresas de servicios públicos para reducir la presión de una tubería submarina que pasa por debajo del lugar del colapso.
Moore aseguró que se limpiarán los escombros, se moverá el barco responsable del accidente y se reconstruirá el puente. También se ha establecido una zona prohibida para drones en el área del colapso para garantizar la seguridad de las operaciones.