La marcha de Aaron Judge hacia los 61 jonrones y la posibilidad de que sus Yankees amarren el título de la División de la Liga Americana deberán esperar al menos otro día.
Con el champán en hielo, Judge fue contenido por sexto encuentro consecutivo, y Clarke Schmidt concedió un sencillo de oro contra el dominicano Vladimir Guerrero Jr. que le propinó la derrota a los Bombarderos ante los Azulejos por 3-2 en 10 entradas el lunes en el Rogers Centre.
“A la hora cero; ahí es cuando quieres batear”, exclamó Judge. “Para eso es que estoy trabajando duro, para colocarme en una posición en la que pueda ayudar al equipo a conseguir el triunfo. Pero confío en cada bateador de nuestro lineup y en cada jugador de nuestra banca”.
El número mágico para que Nueva York asegure el título del Este de la Americana por primera vez desde el 2019 permanece en dos.
“Esperemos lograrlo el martes”, declaró el piloto de los Yankees, Aaron Boone.
Judge, quien no se ha volado la cerca desde que pegó su 60mo bambinazo de la campaña el 20 de septiembre contra los Piratas, se fue de 3-1 con una anotada y dos ponches, que lo tienen ahora de 18-5 (.278) con ocho pasaportes negociados desde su último cuadrangular. Toronto le otorgó un boleto intencional a Judge para llenar las bases en el 10mo capítulo, antes de retirar a Anthony Rizzo con una rodada.
Los seis partidos de Judge sin un cañonazo marcan su tercera sequía más larga de la temporada. Tuvo nueve encuentros en fila sin un vuelacercas del 13 al 21 de agosto, y tuvo siete compromisos sin un jonrón del 14 al 21 de abril.
Con un sencillo contra el abridor de Toronto, Kevin Gausman, Judge extendió su racha a 25 partidos consecutivos embasándose, la más larga por un miembro de los Yankees este año. Rizzo sacudió un doble y el venezolano Gleyber Torres conectó un elevado de sacrificio para que Judge anotara. Isiah Kiner-Falefa pegó un vuelacercas en el segundo inning, su cuarto de la campaña.
Jugando detrás del abridor dominicano Luis Severino, Kiner-Falefa tuvo la oportunidad de iniciar una doble matanza en la cuarta entrada tras un fuerte roletazo de Guerrero, que fue anotado como un hit. La oportunidad perdida resultó costosa debido a que el quisqueyano Teóscar Hernández sacudió un doblete que impulsó dos carreras y empató el partido, justo una razón mas por la que no hubo la cásica celebración con champán en el clubhouse visitante el lunes.
“Solamente nos enfocamos en ganar un juego, y pase lo que pase después, podemos celebrar o no”, expresó Judge. “Tomamos cada juego como si fuese un partido de postemporada: el primer juego del año, incluso el juego de esta noche. Realmente nada cambia”.