TOKIO — Wim Wenders realiza una película sobre baños públicos de lujo en Japón que tendrá lo que el renombrado director alemán denomina “significado social” sobre la gente en las ciudades modernas.
“Mi primera reacción fue, debo admitir: ¿Qué? ¿Baños? ‘Chotto mattene’”, dijo Wenders el miércoles, usando la expresión japonesa para “espera un minuto”.
Pero entonces empezó a ver de qué podía tratarse la historia.
“Para mí, pasó de inodoros a baños. Esa es una palabra muy bonita en inglés, ‘restroom’ (una unión de dos palabras que separadas significan cuarto de descanso). Cuando vi estos lugares los dos días siguientes, me di cuenta de que eran ‘restrooms’ en el verdadero sentido de la palabra”, dijo Wenders a periodistas en el distrito de moda de Shibuya en Tokio, donde se encuentra la docena de baños públicos.
Las instalaciones fueron diseñadas por destacados arquitectos, incluidos Kengo Kuma y Tadao Ando, con la idea de que un baño público agradable pudiera contrarrestar la expectativa común de que estuviera sucio, lleno de pintadas o asociado con el crimen.
Wenders, director nominado a tres premios Oscar por obras que incluyen el documental sobre músicos cubanos “Buena Vista Social Club”, dijo que cuando vio los baños de Shibuya, se conmovió.
“Este es un lugar verdaderamente precioso”, dijo.
El héroe de su película será, de hecho, un empleado sanitario que limpia inodoros, entendiendo su trabajo como un oficio y un servicio al pueblo. Los detalles del guion aún se están trabajando.
Koji Yakusho, conocido por interpretar al hombre común japonés en películas como “Shall we dansu?” (“Shall We Dance”, o «¿Bailamos?”) y “Babel” de Alejandro González Iñárritu, dijo que aceptó el papel tan pronto como se lo ofrecieron porque quería trabajar con Wenders.
“Tengo la sensación de que va a ser una historia hermosa. Y siento que una historia que tiene el inodoro como escenario, con la persona que trabaja allí y la gente que lo usa, ayudará a llevar a un entendimiento de Japón”, dijo Yakusho.
El proyecto Tokyo Toilet se concibió inicialmente para impresionar a los visitantes extranjeros que se esperaban para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, antes de que la pandemia de coronavirus obligara a que los eventos se llevaran a cabo sin espectadores en las gradas.
El baño público diseñado por Ando es redondo con marcos para las paredes exteriores, para permitir que circule el aire. En la vida real, los hombres con monos azules del diseñador de moda japonés Nigo lo limpian sin agua para evitar el moho o la descomposición.
El proyecto, incluida la película de Wenders, cuenta con el respaldo de Fast Retailing, la empresa detrás de la cadena de ropa Uniqlo, y The Nippon Foundation, que lleva a cabo proyectos humanitarios utilizando los ingresos de las regatas.
Wenders dijo que su película, a pesar de su entorno humilde, explorará un concepto profundo.
“Casi creo que es una idea utópica porque el baño es un lugar donde todos son iguales. No hay ricos o pobres, viejos o jóvenes. Todos somos parte de la humanidad”, señaló.