Una ley que prohíbe el aborto en casi todos los supuestos en el estado estadounidense de Virginia Occidental, con excepciones únicamente en caso de violación, incesto o cuando la vida de la madre esté en peligro, entró en vigor este viernes.
El gobernador Jim Justice, del partido republicano, firmó hoy esa ley que fue aprobada el martes por ambas Cámaras de la legislatura estatal. La prohibición tiene efecto de manera inmediata, pero las sanciones —que incluyen penas para médicos que practiquen abortos de manera ilegal— entrarán en vigor en 90 días.
La legislación contempla excepciones en caso de violación o incesto, pero con límites de ocho semanas de gestación para las personas adultas y de 14 para las menores de edad. En ambos casos, la víctima debe reportar el crimen a las autoridades antes de poder abortar, según recogen medios locales.
Hasta ahora, el aborto era legal en Virginia Occidental hasta las veinte semanas de gestación.
El estado —uno de los más conservadores del país— se convierte así en el segundo en ratificar una nueva legislación prohibiendo el aborto por ley desde que el Tribunal Supremo de EE.UU. revocara en junio el fallo «Roe contra Wade», que desde 1973 protegía el derecho a la interrupción del embarazo.
En agosto, Indiana —también bajo control de los republicanos— fue el primer estado en dar este paso, cuya prohibición entró en vigor el jueves.
En otros 12 estados se ha restringido el procedimiento por medio de leyes «resorte», diseñadas para entrar en vigor justo cuando se derogó el derecho al aborto.
Indiana y Virginia Occidental son los únicos que desde junio han aprobado un nuevo proyecto legislativo para restringir el aborto.
En el también conservador estado de Kansas, sin embargo, los votantes se mostraron en un referéndum en agosto abrumadoramente a favor de mantener intacto el derecho al aborto tal y como está regulado actualmente en la Constitución del estado, en lo que fue una sonada derrota para los republicanos.
En paralelo, este mismo martes, el senador republicano Lindsey Graham presentó un proyecto de ley federal destinado a prohibir el aborto tras las 15 semanas de gestación en todo Estados Unidos y que solo recoge excepciones en caso de incesto, violación o peligro para la vida de la madre.