Germán Peña Jorge, uno de los sobrevivientes del trágico derrumbe ocurrido en la discoteca Jet Set, presentó una querella formal ante la Fiscalía del Distrito Nacional en contra de los propietarios del establecimiento: Antonio Espaillat y su madre, Ana Grecia López. En su denuncia, exige que ambos sean sometidos a la justicia y solicita una compensación económica de 50 millones de pesos por los daños físicos y emocionales sufridos.
El abogado que representa a Peña Jorge, Ricardo Alcántara Méndez, fue quien depositó la querella, criticando abiertamente la falta de consecuencias legales tras el suceso. Señaló que han pasado 22 días desde la tragedia y aún no se ha actuado contra los señalados: Espaillat, su madre Ana Grecia y la empresa E y L. En relación con el empresario, expresó: “si se tratara de otra persona, ya estaría preso en Najayo o La Victoria”. Y agregó: “Aquí lo que ha habido es negligencia”.
El recuerdo de una noche de horror
La noche del 8 de abril, Peña Jorge, de 38 años, se encontraba junto a una hermana y una tía disfrutando del espectáculo frente a la tarima, cuando ocurrió el colapso. Fue víctima de lesiones en la cabeza y en un brazo, y quedó atrapado bajo los escombros. Asegura que durante esos momentos críticos, se aferró a la fe y no dejó de orar. Finalmente, un hombre identificado solo como Freddy logró rescatarlo, gesto que agradece profundamente hasta el día de hoy.
Mientras tanto, su hermana permanece ingresada en la unidad de cuidados intensivos de la Plaza de la Salud, con heridas graves. Su tía no sobrevivió al derrumbe. Ahora, como él mismo afirma, lo único que desea es justicia, una demanda que comparten también otras víctimas de lo que ya se conoce como la “discotragedia”.