El ministro del Interior de Venezuela, Diosdado Cabello, informó sobre la captura de dos ciudadanos españoles, tres estadounidenses y un checo, quienes estarían involucrados en una presunta conspiración para realizar actos «terroristas» en el país, incluyendo un plan para asesinar al presidente Nicolás Maduro. Cabello indicó que durante la operación se incautaron más de 400 armas que habrían sido transportadas desde Estados Unidos, y que algunos de los detenidos intentaban llevar mercenarios a Venezuela con la intención de ejecutar los atentados contra Maduro, la vicepresidenta Delcy Rodríguez, y otros líderes del chavismo. Además, señaló que los dos españoles capturados tienen conexiones con el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) de España.
Cabello detalló que los ciudadanos españoles fueron detenidos en Puerto Ayacucho, en el estado Amazonas, y que en los teléfonos incautados se encontraron pruebas de que estaban en contacto con una figura regional del partido opositor Vente Venezuela (VV). Según el ministro, los detenidos buscaban adquirir explosivos y contactar grupos dispuestos a realizar «trabajos especiales», lo que sugiere planes para actos violentos.
El ministro también acusó al excomisario de la Policía de Caracas, Iván Simonovis, de estar detrás del tráfico de armas hacia Venezuela, afirmando que tiene vínculos directos con figuras de la oposición, incluyendo a María Corina Machado. Simonovis, según Cabello, estaría coordinando estas operaciones desde el extranjero con el objetivo de desestabilizar al gobierno venezolano.
Cabello exigió al gobierno de Estados Unidos que aclare el supuesto uso de su territorio para organizar y enviar armas con el propósito de derrocar al gobierno venezolano, que fue reelecto en las elecciones presidenciales del 28 de julio. Según el ministro, Venezuela ha estado bajo un continuo asedio por parte del imperialismo y sus aliados, lo que ha obligado al Estado a tomar medidas para defenderse de estas amenazas.