El tiempo se está agotando para que los nuevos y ratificados funcionarios presenten sus declaraciones juradas de bienes, en medio de la presión de la Cámara de Cuentas y las advertencias de la sociedad civil.
El órgano fiscalizador ha reiterado la importancia de que todos los servidores públicos cumplan con este requisito, en línea con las normas de transparencia establecidas por la ley. Hasta el momento, de los 190 diputados, solo 95 han presentado sus declaraciones, y de los 32 senadores, solo 16 han interactuado con el sistema, según reportó la Cámara de Cuentas este jueves.
Participación Ciudadana ha manifestado que vigilará de cerca el proceso y que se asegurará de que se apliquen las sanciones correspondientes a quienes no cumplan con este requisito.
El retraso en el cumplimiento ha sido atribuido por algunos legisladores a la complejidad del proceso, que incluye la solicitud de una autoauditoría y la entrega de informes detallados sobre el consumo con tarjetas de crédito y otros rubros.
Los representantes de la sociedad civil están atentos para evitar declaraciones amañadas que puedan ocultar irregularidades o ganancias ilícitas relacionadas con la corrupción. También exigen que se impongan castigos legales a los funcionarios que no cumplan con el proceso de transparencia.
El próximo lunes, cuando vence el plazo para presentar las declaraciones, la Cámara de Cuentas podrá retener los salarios de aquellos legisladores que no hayan cumplido con la entrega de sus declaraciones juradas de bienes, como medida preventiva contra posibles actos de corrupción.