La bacteria ‘Staphylococcus aureus’ le provocó una embolia séptica en el cerebro, una infección bilateral de las arterias carótidas y celulitis en el rostro.
Una estudiante británica de piloto de vuelos comerciales murió después de que un mosquito le picara y desarrollara una infección que se propagó a su cerebro, según los resultados de la investigación del deceso expuestos este miércoles durante una audiencia en un tribunal de la ciudad inglesa de Ipswich, informa la prensa local.
Oriana Pepper, de 21 años, murió el 12 de julio del año pasado en un hospital de la ciudad belga de Amberes. La joven había aprobado los exámenes teóricos de un programa para pilotos de la aerolínea EasyJet, por lo que viajó a Bélgica para completar su formación.
Allí Pepper fue picada por un mosquito en la frente, cerca de un ojo, y la zona de la picadura se le inflamó, por lo que el 7 de julio acudió a un hospital, donde le dieron unos antibióticos. Dos días después, volvió al centro médico debido a que su condición había empeorado y tuvo que ser hospitalizada. Pese a que fue intervenida quirúrgicamente, los médicos no pudieron salvarle la vida.
Una «tragedia» inédita
En la audiencia de este miércoles, el forense Nigel Parsley concluyó que la causa de la muerte fue una grave infección provocada por la picadura del insecto. El experto explicó que el deceso de Pepper se dio en tres etapas: la formación de una embolia séptica en el cerebro, una infección bilateral de las arterias carótidas y celulitis en el rostro, todas ellas provocadas por la bacteria ‘Staphylococcus aureus’.
Parsley dijo no haber visto nunca un caso como este, al que describió como una «tragedia».