Yosuke Tanaka y su mujer Miki, los protagonistas de esta historia, son un matrimonio que regenta un negocio de buceo en la ciudad de Toyooka. Hace unos días, un vendedor de equipos de pesca les alertó de que había visto un enorme calamar en una bahía cercana, así que los dos no lo dudaron ni un segundo y cogieron su equipo, un bote y fueron en busca del espécimen.
Ahí estaba. Se trataba de un calamar enorme”, dijo Yosuke Tanaka a la agencia AFP este jueves. “No vimos los tipos de movimientos ágiles que normalmente muestran muchos peces y criaturas marinas. Sus tentáculos y aletas se movían muy lentamente”.
El tamaño del animal, que tenía varios metros de longitud, sorprendió a Tanaka, que también sintió algo de miedo durante su encuentro con el calamar. “Pude ver sus tentáculos moviéndose. Pensé que sería peligroso que me agarrase con fuerza y me llevase a alguna parte”.
Ya se sabía que los calamares gigantes viven en las aguas de Japón y que en alguna ocasión se aventuran cerca de la costa, pero tener la oportunidad de grabarlos tan de cerca sigue siendo todo un privilegio.
“Fue muy emocionante. Creo que no hay nada más raro que esto”, concluyó Tanaka.