Un muerto y 15 heridos dejó el miércoles un choque entre policías y manifestantes que bloqueaban una ruta en el sur de Perú, mientras Lima volvía a la normalidad tras un toque de queda decretado por el presidente Pedro Castillo para contener las protestas por las alzas de precios.
Un trabajador agrícola que participaba en el bloqueo de la ruta Panamericana en la región de Ica, 300 km al sur de la capital, murió en la mañana durante un enfrentamiento con policías.
«Han ingresado 15 heridos, tenemos un herido de gravedad. Hay un civil que ha ingresado fallecido que es producto del conflicto», dijo el director del hospital de la ciudad de Ica, Carlos Navea, en un video publicado en la página de Facebook del centro de salud.
El médico precisó que los heridos que llegaron al hospital son 12 policías y tres manifestantes.
Los choques se desataron cuando un piquete policial intentó desalojar a decenas de trabajadores agrícolas que bloqueaban la Panamericana en Ica, región famosa por sus cultivos y donde operan muchas empresas agroindustriales.
Toque de queda diurno
La tensión viene creciendo en Perú desde el lunes, cuando habitantes molestos por las alzas de precios de los combustibles y alimentos desataron protestas en Lima, Ica y otras regiones, las primeras que enfrenta Castillo, un maestro rural de 52 años, desde que asumió el poder hace ocho meses.
En respuesta, el mandatario decretó sorpresivamente un toque de queda diurno el martes en Lima y en el vecino puerto del Callao, que en conjunto albergan a 10 millones de personas, casi un tercio de la población peruana.
El toque de queda fue repudiado por amplios sectores de la población y estimuló nuevas protestas en Lima.
El mandatario levantó anticipadamente las restricciones a media tarde del martes, tras una reunión con los líderes opositores que dominan el Congreso, y cuando había choques de manifestantes y policías, y ataques a edificios públicos y comercios en el centro de Lima.
Grupos de manifestantes apedrearon la sede nacional de la Fiscalía e ingresaron al Palacio de Justicia, donde sustrajeron computadores y otros equipos, indicaron las autoridades. También causaron destrozos en varios comercios y en una oficina de una administradora privada de fondos de pensiones.
En estos disturbios fueron detenidos 18 manifestantes. «Los sujetos serán denunciados por el delito contra la tranquilidad pública», indicó la Policía.
El fin anticipado del toque de queda fue recibido con vítores por centenares de manifestantes congregados cerca del Congreso y otras partes de Lima, que sintieron que le habían doblado la mano al presidente izquierdista.