Un hombre ha muerto en Florida tras quedarse enterrado bajo la arena después de que la duna bajo la que se encontraba sacando fotos colapsase sobre sí misma.
Aunque la historia parece sacada de una película de terror, esto es justo lo que ocurrió, defiende la policía de Florida. El difunto, un joven de 35 años llamado Sean Nagel, se encontraba cerca de la playa de Rock Beach grabando el amanecer con su cámara GoPro cuando se produjo el fatal accidente. Todo apunta a que Nagel estaba tumbado bajo un acantilado cuando una duna de arena le sepultó por completo.
Su cuerpo fue descubierto por una persona que paseaba por la zona y que alertó a las autoridades después de ver parte del cuerpo del joven bajo la arena. “Era una escena completamente inusual: sus pies estaban sobresaliendo en la arena. Luego tuvimos que excavar y encontrar el resto del cuerpo, claro”, le explicaba el sheriff local William Snyder a la cadena NBC.
“Descubrimos arena en sus pulmones. De alguna forma, mientras estaba allí, inexplicablemente, la erosión de la playa o una montaña de arena, se derrumbó sobre él, no sabemos por qué”, continuó Snyder. “Obviamente, no pudo salir de ahí y murió. La causa de la muerte es asfixia”.
Las autoridades realizarán un test toxicológico a Nagel, aunque no creen que vaya a cambiar su conclusión previa. “Los investigadores están esperando las pruebas de toxicología, que es el procedimiento estándar. Sin embargo, no es probable que esas pruebas vayan a cambiar el análisis de este episodio como un trágico accidente”, afirmaba el departamento de policía local.
Viendo las imágenes de la zona se puede entender mejor el accidente. Probablemente Nagel se encontrase tumbado bajo uno de estos pequeños acantilados cuando la duna que había por encima colapsó y cayó sobre él, provocando el accidente que le costó la vida.