Una familia de turistas estadounidenses provocó una pequeña crisis esta semana en el aeropuerto de Ben Gurion, en Israel. Los viajeros se presentaron el pasado martes en la puerta de embarque con un souvenir inesperado: un proyectil de artillería aún activo.
Los turistas llevaban el proyectil en una mochila y lo presentaron a los guardias de seguridad preguntando si lo debían facturar con el resto del equipaje. La presencia del explosivo pronto provocó el pánico entre los demás pasajeros. Algunos simplemente salieron corriendo mientras otros se echaron al suelo entre gritos de alarma.
Las autoridades del aeropuerto ordenaron de inmediato la evacuación de esa zona del aeropuerto y llamaron a las autoridades para que se hicieran cargo del proyectil de manera segura. Al parecer, los turistas habían encontrado el proyectil durante una visita a los altos del Golán, una zona que fue objeto de intensos bombardeos en 1967 durante la denominada Guerra de los seis días entre Israel y Siria. Más tarde, en 1973, la región fue el escenario de otro conflicto bélico, la Guerra de Yom Kipur. A resultas de estas batallas, no es raro encontrar artefactos bélicos en la zona, muchos de ellos aún sin explotar.
Tras poner la bomba a buen recaudo, la familia fue interrogada por las autoridades Israelíes y después puesta en libertad con solo una amonestación. Por fortuna, no hubo que lamentar heridos en el incidente, aunque otro pasajero hubo de ser atendido tras caer de bruces intentando saltar una cinta transportadora de equipaje en su huida.