El gobierno chileno mantiene su compromiso con las Fuerzas Armadas de devolver el orden al país, alterado por actos violentos de vandalismo que se multiplicaron este sábado por diferentes partes del territorio y que ya han causado al menos tres muertes.
los militarización del país Ha ido aumentando para tratar de controlar los excesos violentos en los que se derivó la radicalización de la protesta ciudadana contra el aumento del precio del metro desde el viernes pasado. Según el ministro de Defensa de Chile, Alberto Espina, 9,000 efectivos militares cubren las 136 estaciones de metro y 43 instalaciones de infraestructura crítica, como distribución de agua, electricidad, combustible y gas, talleres de metro o aeropuertos. "Las fuerzas armadas se han concentrado en proteger las instalaciones básicas", dijo.
â € ”Van a cumplir con su deber de una manera rigurosa y respetuosa. Cuentan con el pleno apoyo del presidente para actuar con todos los medios a su disposición.â €, agregó.
Las fuerzas de seguridad se vieron abrumadas por la multitud de actos de vandalismo que estallaron en puntos muy diferentes en la capital de Santiago, entre incendios en estaciones de metro, barricadas e innumerables saqueos en tiendas, supermercados, bancos y hoteles.
Esto motivó la declaración de emergencia del sábado para confiar al Ejército el control de la situación en Santiago, a lo que el Gobierno agregó las regiones de Valparaíso (centro), Concepción (sur), las comunas de Coquimbo y La al amanecer. Serena, en la región de Coquimbo (norte) y la comuna de Rancagua, O & # 39; Higgins (centro).
Además, las autoridades militares a quienes se designó el comando decretaron el toque de queda en Santiago, Valparaíso y Concepción hasta las 7.00 hora local (10.00 GMT), una medida que no impidió, aunque en menor medida, el saqueo continuo en centros comerciales y supermercados, algunos de los cuales se incendiaron.
Después de sofocar las llamas de uno de los supermercados saqueados en el sur de Santiago, las autoridades encontraron dos cuerpos calcinados y otra persona en muy mal estado quienes fueron llevados a un hospital y murieron, por lo que son las primeras muertes de estos disturbios.
LA VIOLENCIA ES AMPLIADA POR EL PAÍS
"Estamos viviendo niveles muy altos de delincuencia, saqueos y saqueos", dijo el ministro de Defensa. Los actos violentos no fueron controlados este sábado y se repitieron en varias regiones del país, especialmente en las cuatro para las cuales se aplica el estado de emergencia durante los próximos 15 días.
Las llamas se encendieron en supermercados, vehículos, autobuses e incluso iglesias en un torbellino violento que parecía incontrolable. y que ni siquiera el anuncio del presidente del país, Sebastián Pià ± era, que paralizará el aumento del boleto del metro, logró calmarse.
El presidente también te convocóuna mesa de diálogo "amplia y transversal" para abordar las demandas sociales, que en este momento no tienen un líder visible o una lista precisa de solicitudes.
Aunque no lo mitigó por completo, la violencia disminuyó a medida que el toque de queda comenzó a prevalecer al amanecer, lo que prohibía la libre circulación de ciudadanos por las calles si no tenían una conducta segura.
TRANSPORTE AFECTADO
Después del estallido de violencia y los efectos de muchas estaciones, que fueron quemadas, el Metro de Santiago decretó el cierre de todas sus líneas, y este domingo la compañía de autobuses de la ciudad suspendió el servicio hasta las 7.30 hora local (10.30 GMT) del domingo.
Promover, adicional, Al menos 42 vuelos fueron cancelados con la salida y llegada al aeropuerto internacional de Santiago.
El sistema de autobuses Transantiago fue suspendido en toda la capital debido a la falta de seguridad., informaron los operadores de red, y los principales centros comerciales y supermercados fueron cerrados, según testigos de Reuters
Se cancelaron los eventos culturales y deportivos, mientras que la red de trenes subterráneos se suspendió por completo y las embajadas actualizaron sus advertencias de seguridad para expatriados y visitantes, instándolos a evitar las multitudes.
En solo tres semanas, Chile planea recibir al presidente estadounidense Donald Trump, al presidente ruso Vladimir Putin y al presidente chino Xi Jinping, entre otros, durante una cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico.
Poco después de ese evento, el país organizará otra reunión de líderes mundiales en la cumbre de las Naciones Unidas sobre el cambio climático. COP25.
Con información de Reuters y EFE
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