El mandatario mexicano se reunió previamente con la vicepresidenta de EE.UU., Kamala Harris, en su residencia oficial.
El presidente de EE.UU., Joe Biden, recibió este martes en La Casa Blanca a su homólogo mexicano, Andrés Manuel López Obrador, para abordar una agenda bilateral que tiene entre sus puntos calientes la cuestión migratoria y las medidas para el combate de la inflación.
«Esta no es la primera ni la última vez que cerraremos filas para ayudarnos, a pesar de nuestras diferencias», dijo López Obrador a su par estadounidense durante un encuentro con los medios, en el que leyó las cinco propuestas de su Gobierno para apuntalar la relación bilateral y atender los desafíos compartidos.
Biden, por su parte, recalcó que su país veía a México como un «socio igualitario» y destacó que más allá de los titulares «exagerados», la relación entre ambos mandatarios es «fuerte y productiva».
«Diría que es una sociedad, más que una relación», aseveró el inquilino de la Casa Blanca, quien reconoció que el asunto migratorio «ha llegado a niveles históricos» en el hemisferio y requiere un abordaje conjunto.
Después de prometer que su Gobierno «va a crear oportunidades de trabajo legales para los migrantes», Biden afirmó que el año pasado su país batió récord en la emisión de visas de trabajo para ciudadanos centroamericanos y adelantó que pretendía «duplicar» la entrega de esos documentos en los próximos meses.
«Transformar, no mantener»
Una de las propuestas más novedosas que hizo el presidente mexicano a Biden fue la de «suspender de inmediato» varios aranceles a alimentos y otros bienes, más allá del T-MEC, con el objetivo de beneficiar a ambos países, en momentos en que la inflación asedia sus economías.
El mandatario consideró aunado a la eliminación de esos aranceles, podrían suprimirse las «tediosas» medidas burocráticas y regulatorias para el comercio de alimentos y otros bienes, «que aminoren los precios a los consumidores«.
Otro planteo de López Obrador fue instar a Biden a implantar un plan de regularización migratoria, destinado a las personas que llevan años trabajando «honradamente y contribuyen al desarrollo» de EE.UU.
Aunque reconoció que esa medida podría acarrear la queja de los republicanos, el mandatario mexicano aseveró: «La salida [a los desafíos] no está en el conservadurismo sino en la transformación». Además de ese proceso de regularización, insistió en la necesidad de otorgar visas a los trabajadores mexicanos y centroamericanos, «para asegurar que no se paralice la economía por falta de mano de obra». FUENTE RT EN ESPAÑOL