Actualmente hay 800 mil usuarios conectados ilegalmente a los que ni se les factura ni se les cobra
El Gobierno presentó este lunes un plan que busca eficientizar las operaciones de las empresas distribuidoras de electricidad (EDE) en el país con el objetivo de reducir las pérdidas al 2027.
La presentación estuvo a cargo del presidente del Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras de Electricidad (CUED), Celso Marranzini, quien indicó que actualmente hay un «crecimiento sin precedentes» de la demanda de energía en las distribuidoras.
Durante LA Semanal con la Prensa, explicó que las redes de distribución operan en sobrecarga porque los flujos de energía superan la capacidad en redes durante las horas de mayor consumo.
Asimismo, manifestó que la sobrecarga de las redes ha aumentado hasta en los circuitos 24 horas.
Respecto a los transformadores de potencia en sobrecarga, Marranzini informó que en Empresa Distribuidora del Norte (Edenorte), de 72 transformadores de potencia, siete están en sobrecarga.
En la Empresa Distribuidora del Sur (Edesur), de 59 transformadores, 25 están en sobrecarga, mientras que Empresa Distribuidora del Este (Edeeste) posee el mayor porcentaje, al contar con 29 en sobrecarga de los 65 que posee.
Conexiones ilegales
Celso Marranzini informó que actualmente hay más de 800 mil usuarios conectados ilegalmente a los que ni se les factura ni se les cobra.
También afirmó que esto sucede porque es una deficiencia de las propias empresas distribuidoras que no facturan.
Explicó que estas conexiones ilegales crean averías en circuitos de conexiones legales.
«Conexiones ilegales que definitivamente crean averías en los circuitos de conexiones legales, y eso por supuesto trae muchos de esos disgustos que a veces encontramos porque circuitos de 24 horas están saliendo de servicio por esas conexiones ilegales«, dijo.
Sin embargo, apuntó que este 2024 «será imposible invertir esto por el tiempo que toma comprar contadores y transformadores, pero sí es la meta para el año 2025 y 2026″.
Destacó que con el apoyo de bancos multilaterales para financiar las inversiones se han destinado 650 millones de dólares, a tasas concesionales, para mejorar las redes y sistemas modernos para la gestión comercial y de control de las pérdidas.
El BID ha apoyado con 155 millones de dólares para Edesur, el Fondo OPEP para el Desarrollo Internacional (OFID) con 120 millones de dólares y la Agencia Japonesa de Cooperación Internacional (JICA) con 36 millones de dólares para alumbrado público.
Asimismo, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) apoyó con 39 millones de dólares para alumbrado público, Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF) con 75 millones de dólares en rehabilitación de redes y el Banco Mundial con 255 millones de dólares en rehabilitación de redes y sistemas de gestión comercial y de medición.
Déficit estimado para 2024
En las EDE se presentó un déficit de 610 millones de dólares, en el subsidio del estado a clientes 800 millones de dólares, y en ayuntamientos y acueductos unos 40 millones de dólares.
La meta
Para el 2027, la meta del Gobierno es llevar a Edenorte y Edesur al entorno del 20 % de pérdida de energía, y Edeeste al 40 % para lo cual se busca mejorar la gestión en zonas que cuenten con las redes adecuadas, invertir en redes en los lugares que lo requieran y perseguir el fraude en clientes de grandes consumos.
Estrategias a corto plazo
En lo administrativo: auditar estados al 2023, realizar estados mensuales financieros y operaciones para ser representados al CUED, al gabinete eléctrico y al Consejo Económico y Social (CES); hacer un presupuesto del Plan Anual de Compras (PAC) y del Plan Operativo Anual (POA); poner al día las cuentas por pagar a suplidores; y realizar estados mensuales para ser presentados al consejo tanto financieros como de operaciones estados auditados anuales.
En lo referente a lo operacional, Marranzini explicó que se harán compras masivas de transformadores de distribución y de medidores para eliminar conexiones directas y sustituir medidores dañados; compra de transformadores de potencia; compra masiva de interruptores de circuitos (ITC) para aislar circuitos durante mantenimientos; hacer acciones conjuntas entre las EDE para lograr una economía de escala; y hacer balances de carga para determinar pedidas de energía en circuitos.
De igual modo, mejorar y ampliar la telemedición a grandes clientes; extender el alcance de la micro medición de los balances de energía para reducir pérdidas; mejorar las exigencias y supervisión de los contratistas; incrementar las normalizaciones de suministros con irregularidades (fraudes); e incrementar las inspecciones para asegurar la energía entregada a grandes clientes.
También se busca mejorar los tiempos de respuesta en las solicitudes de servicio y en atenciones de averías, para que no sea mayor de 30 minutos; mejorar las atenciones a los clientes en las oficinas comerciales; instalar equipos de pago en lugares accesibles como plazas comerciales, estaciones del metro, teleférico; y llevar oficinas móviles de pagos a lugares de difícil acceso.
Entre las estrategias para el fortalecimiento institucional, Marranzini citó un consejo de administración compuesto por personas competentes y con conocimientos en áreas financieras eléctricas y jurídicas, así como contratación de gerentes y directores con capacidad probada.
Además, la contratación de equipos de auditoría interna independientes de los gerentes generales y la elaboración del manual de compra y contrataciones de acuerdo con el reglamento de la Dirección de Compras y Contrataciones.
A fines de mantener la transparencia del plan, se planteó presentar a la población los resultados mensuales de las distribuidoras (estados operacionales y financieros) y crear un portal para que los clientes conozcan las condiciones de su circuito y los detalles de los mantenimientos. Diario Libre