Si nadie usa ya mascarilla por la eliminación de las medidas, ¿tiene sentido usarla de todos modos para protegerse del coronavirus?
Brevemente, la respuesta es: sí, es mejor usarlas. Las mascarillas o tapabocas, son efectivos para reducir el riesgo de contraer COVID, incluso si todos a su alrededor están con la cara descubierta. Pero esa efectividad varía dependiendo del tipo de máscara que use y de cómo la use.
Las mascarillas FFP2 y N95 bien ajustadas proveen una protección 75 veces mayor en comparación con una mascarilla médica o quirúrgica usada del mismo modo, según estudios.
«Muchos trabajadores de salud, científicos que trabajan con patógenos peligrosos y trabajadores que pueden estar expuestos a partículas nocivas en el aire, dependen de mascarillas especializadas como las N95, para protegerse. Por eso sabemos que las mascarillas de alta eficiencia, correctamente ajustadas, sí funcionan,” dijo Linsey Marr, profesora en Virginia Tech y experta en transmisiones virales a través del aire.
El nivel de protección de una mascarilla depende de qué tan bien ajustada se use. Si no está bien ajustada, de modo que cree un espacio sellado alrededor de la nariz y la boca, no funcionará tan bien.
Las mascarillas bloquean cuatro veces más las partículas cuando la pieza que se dobla sobre la nariz se ajusta adecuadamente al contorno de esta.