Los suministros de armas a Kiev, las maniobras de los países occidentales y los sobrevuelos de la OTAN conducen a la «tensión en torno a Ucrania», señaló el portavoz de la Presidencia de Rusia, Dmitri Peskov, en una charla con varios periodistas. Además, calificó la situación de «efectivamente muy, pero muy tensa». Asimismo, el vocero añadió que Moscú quiere que sus interlocutores, entre ellos Alemania, también presten atención a este aspecto.
El secretario de prensa de la Presidencia rusa se pronunció también sobre las amenazas de Berlín con detener el gasoducto Nord Stream 2, en referencia a una declaración al respecto del canciller de Alemania, Olaf Scholz, quien dijo este martes que su país está dispuesto a «discutir» esta medida en caso de una «intervención militar en Ucrania».
Peskov ironizó que «alguien amenaza con regularidad y cada día con algo» a Rusia. Mientras tanto, «es imposible desactivar el proyecto comercial internacional Nord Stream 2, porque no lo han activado todavía», aclaró el vocero de Vladímir Putin. Además, manifestó que el hecho de no activarlo es «malo para los participantes del proyecto y también para los usuarios, para el desarrollo económico de Europa en general».
Por su parte, el Ministerio de Exteriores ruso calificó este miércoles de provocación las declaraciones de un medio estadounidense y la Casa Blanca sobre una supuesta evacuación de la Embajada rusa en Ucrania. Los diplomáticos llamaron a EE.UU. a dejar de divulgar las especulaciones sobre los presuntos planes rusos de invadir Ucrania y las atribuyeron a un «comportamiento provocador», por parte tanto de Kiev como de Washington.