Apenas unos días después de anunciar que Richaun Holmes se perdería lo que restaba de temporada por motivos indeterminados, los Kings han reconocido cuál es el asunto en cuestión. Lejos de los motivos que se suponían en un principio, la causa de esta ausencia es que el jugador se enfrenta actualmente a cargos por violencia doméstica, en concreto de agredir a su hijo de seis años.
Según afirma Robin Epley, periodista del Sacramento Bee, la ex mujer de Holmes asegura que en el mes de febrero el jugador, «en un ataque de frustración», propinó un golpe a su hijo en la cabeza que le hizo sangrar. Richaun y se ex pareja se encuentran actualmente en pleno proceso por determinar la custodia del niño, y por ahora se ha ordenado a Holmes permanecer alejado de ella y del infante hasta su cita en el tribunal este mismo mes de marzo.
El pívot, por su parte, ha negado la situación: «Nunca respondo a acusaciones, pero cuando se involucra a mi hijo tengo que tomar la palabra. Hay que ser muy tonto para pensar eso de mí. Mi hijo es mi razón de ser. Vivo por y para hacerle feliz y jamás se me ocurriría levantarle la mano».
Mientras, los Kings, que habían mostrado su «total apoyo» al jugador cuando los cargos aún no eran de conocimiento público, han emitido ahora otro comunicado: «A toda la organización de los Sacramento Kings le gustaría expresar su fuerte rechazo a cualquier parte de violencia o asalto doméstico. Respetaremos el proceso judicial y continuaremos siguiendo de cerca la situación».