El diputado brasileño Arthur do Val ha presentado este miércoles su dimisión después de que el Consejo de Ética de la Asamblea de Sao Paulo aprobara por unanimidad revocar su mandato debido a unos audios en los que se le podía escuchar hacer comentarios machistas sobre refugiadas ucranianas.
Los diputados de esta comisión solicitan para él un juicio político por romper el decoro parlamentario por aquellos comentarios en los que Do Val aseguraba que las mujeres que huían de Ucrania de la guerra «son fáciles porque son pobres».
A pesar de presentar su renuncia, si la petición de juicio político es aprobada por el pleno de la Asamblea Legislativa de Sao Paulo, Do Val quedará inhabilitado durante los próximos ocho años para ocupar cargos de responsabilidad política. Para ello, 48 de los 94 diputados tendrían que votar a favor.
Do Val, del conservador Unión Brasil, sostiene que está siendo víctima de una «persecución política» y ha asegurado que no se rendirá. «Sin cargo, los diputados ahora están obligados a discutir mis derechos políticos, lo que deja claro que lo que ellos quieren en verdad es echarme de las elecciones», ha dicho.
«Estoy siendo víctima de un proceso injusto y arbitrario dentro de la Asamblea. Mi derecho a la defensa fue ignorado por los diputados, que promueven una persecución política», por lo que «voy a renunciar a mi cargo por respeto a los 500,000 paulistas que me votaron».
Durante la audiencia celebrada la semana pasada en la que se aprobó votar en la Asamblea su juicio político, Do Val se disculpó ante el grupo de mujeres ucranianas que acudió a protestar, al mismo tiempo que acusaba al comité de ética de guiarse por su «odio» hace él.
«Me equivoqué. Quiero disculparme principalmente con las mujeres ucranianas que están aquí. Ahora, seamos honestos, todos saben que este proceso de casación no es por lo que dije, sino por quién lo dijo. La verdad es que todos aquí me odian. Este proceso no es por mis faltas, sino por mis virtudes», dijo.