El senador por la provincia de La Romana, Eduard Espiritusanto, presentó ante el Senado de la República un proyecto de ley para la regulación estricta del uso, producción, importación y distribución de precursores químicos, con especial enfoque en el fentanilo, una sustancia que ha desatado una crisis de salud pública a nivel mundial.
El proyecto, titulado « Ley para el Control y Regulación de Precursores Químicos, Sustancias Químicas Esenciales y la Producción de Sustancias Psicotrópicas«, tiene como objetivo prevenir que estas sustancias, utilizadas en la producción de medicamentos, sean desviadas de manera ilícita para la fabricación de drogas sintéticas, las cuales representan una grave amenaza para la salud pública.
Según estadísticas recientes, el abuso del fentanilo ha causado la muerte de aproximadamente 100,000 personas al año solo en los Estados Unidos. Espiritusanto explicó que con esta iniciativa busca fortalecer las capacidades de fiscalización y control en la cadena de distribución de estos productos químicos, evitando su uso indebido en la elaboración de drogas sintéticas que están afectando seriamente a la juventud y a la sociedad en general.
Acción preventiva y concientización
El legislador también señaló que el Estado dominicano debe actuar con prontitud, pues investigaciones recientes han evidenciado que el fentanilo ya circula en las calles del país. Por ello, se propone que el gobierno, a través de los Ministerios de Salud y Educación, lleve a cabo una campaña publicitaria a gran escala destinada a concientizar a la población, especialmente a los jóvenes, sobre los peligros y la muerte asociada al uso del fentanilo.
Con esta ley, se espera establecer un marco regulatorio que permita enfrentar de manera efectiva la creciente amenaza del fentanilo y otras sustancias químicas utilizadas en la producción de drogas sintéticas, en estrecha colaboración con organismos internacionales para asegurar la correcta aplicación de las normativas
.El proyecto de ley busca combatir el tráfico de drogas sintéticas y proteger la salud pública, estableciendo medidas preventivas que fortalezcan el control y la fiscalización de sustancias químicas peligrosas para el bienestar de la población.