El primer ministro de Haití, Alix Didier Fils-Aime, viajó este martes a Estados Unidos para participar mañana en una reunión tripartita de la ONU, la Comunidad del Caribe (Caricom) y la OEA, cuyo objetivo es fortalecer la estabilidad en el país caribeño.
La oficina del primer ministro señaló en un comunicado: “Los debates se centrarán, en particular, en la actualización de la hoja de ruta para Haití y las etapas de seguimiento (bajo la dirección de la OEA), así como en la reunión del Grupo de Amigos de Haití”.
Con su asistencia al encuentro en Washington, Fils-Aime reafirma la disposición de su gobierno de “trabajar, en estrecha colaboración con los socios internacionales, para consolidar la estabilidad política y la recuperación económica y social del país”.
El secretario general de la OEA, Albert Ramdin, presentó el pasado 20 de agosto la segunda versión de la hoja de ruta para apoyar la estabilidad y la paz en Haití. Este plan, elaborado junto a las autoridades haitianas y socios internacionales, prioriza la seguridad y estima que el país necesitará 2.600 millones de dólares para el período 2025-2028.
Las responsabilidades se repartirán entre tres instituciones: la OEA coordinará y movilizará recursos y apoyo político; la Caricom facilitará el compromiso político y la interacción directa con actores haitianos; y la ONU aportará mantenimiento de la paz, asistencia técnica continua y apoyo político de alto nivel.
Según datos de la ONU, en los primeros seis meses del año, los homicidios intencionados en Haití aumentaron un 24 %, totalizando 4.026 asesinatos. La violencia de las bandas, que controla el 90 % de la capital, ha provocado el desplazamiento interno de aproximadamente 1,3 millones de personas.
Actualmente, la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MSS) opera en el país con cerca de 1.000 efectivos liderados por Kenia, brindando apoyo a la Policía Nacional Haitiana (PNH) en su lucha contra las bandas, aunque los resultados hasta ahora han sido limitados.