Presidente Abinader, bajo presión de grupos liberales y nacionalistas

Podría verse obligado a inclinarse más hacia uno de esos sectores, lo que tendrá un efecto político en el Gobierno

Antes de cumplirse los dos años de la gestión del presidente Luis Abinader, la capacidad del gobernante para mantener de buen ánimo alrededor de su gobierno a sectores históricamente antagónicos generó asombro.

Los sectores más liberales ocupan varios cargos en el gobierno del Partido Revolucionario Moderno (PRM), mientras que los conservadores, encabezados por la Fuerza Nacional Progresista (FPN), habían expresado conformidad con la política migratoria del Gobierno y especialmente con la iniciativa de construir una verja doble (muro) en la frontera con Haití y arrancó por Dajabón.

Sin embargo, desde principio del mes de agosto pasado esa situación empezó a cambiar por el enfrentamiento del ministro de Economía, Pavel Isa, con sectores nacionalistas, que lo acusan de promover una agenda contraria a los intereses del país.

Antes, los sectores más liberales del país habían ejercido presión sobre el presidente con protestas y declaraciones para exigir la aprobación del Código Penal que despenalice el aborto en tres circunstancias.
El mandatario se ha declarado a favor de esa causa, pero aclaró que no puede incidir para variar el criterio de los legisladores sobre ese tema porque no sería correcto.

El tema es políticamente vital para mantener la popularidad del gobierno de Abinader, porque ambos bandos tienen incidencia en la opinión pública y en el caso de los nacionalistas, manejan temas que tienen mucho apoyo en la población.

Basta observar la posición de uno de los miembros del consejo directivo de Participación Ciudadana, Francisco Álvarez.

El 19 de octubre de este año, escribió en su cuenta de Twitter. “Leonel y Abel se disputarán el voto conservador y si el PRM pretende competir por dicho voto, pudiera distanciarse del voto liberal. El tema no es tan simple, pero la idea es motivar su discusión”.

En la práctica, Abinader se ha mantenido más cerca de las ideas de los conservadores, pero desde el enfrentamiento entre esos sectores y el ministro de Economía lo ha colocado en esa acera.

Los sectores conservadores tienen una campaña contra el censo nacional de población y vivienda que implementará este mes la Dirección Nacional de Estadísticas, dependiente del Ministerio de Economía.

Como parte de la campaña contra el censo, el abogado y dirigente de la FNP Vinicio (Vinicito) Castillo solicitó a la Dirección General de Compras y Contrataciones Públicas que realice una investigación sobre el proceso de adjudicación de contrato de consultoría y análisis por la suma de 12,600,000 millones de pesos, por parte de la Oficina Nacional de Estadística (ONE), supuestamente sin cumplir con el mandato de la Ley 340 de Compras y Contrataciones.

El detonante para el enfrentamiento entre los sectores nacionalistas y el ministro de Economía fue el comentario de Pavel Isa luego de la marcha patriótica del seis de agosto pasado en el Conde.

“Tanto amor por la patria y tanto odio hacia la gente”, escribió Isa luego de la manifestación, lo que lo ha colocado en el centro de los ataques de los promotores de esas manifestaciones.

Exigen PRM cumpla promesa despenalizar aborto

La aprobación del Código Penal ha quedado estancada en el Congreso y en poco más de dos años que lleva el PRM con el control del poder, la pieza no ha avanzado.

Recientemente, el presidente de la Cámara de Diputados, Alfredo Pacheco, culpó a los promotores de la despenalización del aborto en tres circunstancias de boicotear la sanción de la pieza.

Esas declaraciones encontraron respuesta en Francisco Álvarez de Participación Ciudadana. “Yo quiero un nuevo código penal pero uno que no discrimine a las mujeres o a las personas por su orientación sexual”.

Al tildar Pacheco de ‘pequeñez’ un texto discriminatorio comete un error grande”, comentó en su cuenta de Twitter.

Agregó que es irresponsable por parte de Pacheco denunciar que se usan las tres causales para impedir la aprobación del Código Penal, sin identificar quiénes. “Que señale a los que alcanzaron sus posiciones prometiendo 3 causales y luego no han cumplido. Y no sólo es votar sino ejercer liderazgo para aprobación”, apuntó.

Los movimientos feministas a principio del 2021 montaron un campamento de protesta frente al Palacio Nacional, para exigir al presidente Luis Abinader que cumpla su promesa de impulsar la despenalización del aborto en tres circunstancias en el Código Penal.

Esas manifestaciones contaron con el apoyo de dirigentes del PRM y funcionarios del gobierno como la senadora de la capital, Faride Raful, la ministra de la Mujer, Mayra Jiménez y la directora de Ética e Integridad, Milagros Ortiz Bosch.

El problema de ese tema, para este y los gobiernos anteriores, es que los representantes de las iglesias y los sectores conservadores salen a presionar desde que el Código se coloca en la agenda del Congreso. Las voces que más fuerte se pronuncian son el arzobispo de Baní, monseñor Víctor Masalles y el pastor evangélico, Ezequiel Molina, famoso por el evento la Batalla de la Fe.

¿Cuáles implicaciones políticas tiene el tema?

Por lo que se puede observar, el presidente Luis Abinader ha tratado de complacer a sectores liberales y conservadores. Los sectores de la sociedad civil, que en su mayoría, apoyaron al PRM y Abinader, casi todos ocupan importantes cargos en el gobierno. Para los sectores nacionalistas, el gobernante ha tenido un discurso duro contra los ilegales en el país e inició la construcción del muro fronterizo. El censo, el último tema que ha enfrentado a esos sectores, el presidente Abinader llamó apoyarlo, incluso el PRM suspendió sus actividades políticas. Es probable que la apuesta política del gobierno sea garantizar el voto de los sectores liberales, pues los más conservadores y nacionalistas se han identificado más con Leonel Fernández y además ninguno de esos voceros ocupa cargos en el gobierno. El efecto político que podría tener para Abinader, es que el tema nacionalista tiene más rédito electoral que las banderas de grupos liberales. FUENTE EL CARIBE