La semana pasada Volkswagen anunció que su CEO, Herbert Diess, dejaría su cargo y sería reemplazado por el actual CEO de Porsche, Oliver Blume. Al principio, no estaba claro qué condujo a la repentina salida de Diess, pero un nuevo reportaje de Bloomberg arroja luz sobre una posible razón.
Bloomberg sugiere que Diess fue forzado a irse por los graves retrasos en el desarrollo de software y contratiempos que suspendieron un puñado de lanzamientos de nuevos Porsche, Bentley y Audi. Para colmo de males, el software plagado de fallos es lo que originalmente retrasó la gama de coches eléctricos Volkswagen ID.
Diess tampoco era muy querido entre los altos mandos de Volkswagen, principalmente debido a su estilo de liderazgo bastante duro. Según informa Bloomberg:
En su esfuerzo por transformar la compañía en un líder de vehículos eléctricos, se enfrentó repetidamente con los líderes sindicales al advertir que VW estaba perdiendo frente a Tesla y necesitaba eliminar miles de puestos de trabajo. Pero los fallos en la unidad de software del fabricante de automóviles, Cariad, finalmente erosionaron el apoyo a Diess por parte de la poderosa familia Porsche–Piëch que toma las decisiones.
En diciembre, VW revisó su consejo de administración, despojando a Diess de algunas responsabilidades y asignándole la tarea de solucionar Cariad. Si bien ha habido muchos cambios desde entonces, Diess no logró que los problemas desaparecieran.
Estos problemas con Cariad retrasaron el lanzamiento del Porsche Macan eléctrico, lo cual es una mala noticia porque Porsche está buscando salir a bolsa a finales de este año. La lista de nuevos vehículos eléctricos de Audi también se retrasó dos años, hasta 2027. Mientras tanto, el plan de Bentley de volverse completamente eléctrica para finales de la década está en peligro de muerte. En general, hay algunos problemas importantes gestándose en Alemania.
Si bien todos estos factores pueden haber contribuido a la caída de Diess en Volkswagen Audi Group, hay un rumor un poco más escandaloso sobre los eventos que rodearon su repentino despido.
Es probable que nunca sepamos todo lo que se dijo en la reunión que puso fin al mandato de Diess como director ejecutivo de Volkswagen. En un giro un tanto irónico, fue en noviembre cuando se informó de que Diess había sobrevivido a un voto de confianza de la junta.
Diess no se irá mañana. Permanecerá al frente de VW hasta el 1 de septiembre, cuando su sucesor, Blume, empiece a compaginar su nuevo cargo con su puesto actual en Porsche.
Diess estuvo al frente de la transición a coches eléctricos de Volkswagen. Su plan de gastos requería invertir $ 91.000 millones en software y vehículos eléctricos durante el próximo lustro, según Bloomberg. Hace apenas un año, la empresa automotriz se comprometió a contratar a 10.000 personas solo en operaciones de software.
No sabemos exactamente qué vendrá después para Diess y Volkswagen, pero una nueva era está a punto de comenzar para ambos.