Las autoridades de Paraguay acordaron este miércoles unificar acciones para combatir los criaderos del mosquito transmisor del virus de chikunguña, que ya causado 14 muertes e infectado a unas 18.000 personas, especialmente en la capital del país y su zona metropolitana.
El jefe del Gabinete Civil, Hernán Huttemann, encabezó un encuentro en el Palacio de López (sede del Ejecutivo), al que acudieron los ministros de Salud, Julio Borba, y de Educación y Ciencias, Nicolás Zárate, así como autoridades nacionales y locales.
Durante la reunión se acordó intensificar la campaña de comunicación para prevenir los criaderos y las tareas de disposición de desechos.
«Ya estamos rondando los 14 fallecidos», dijo Borba durante su intervención en el encuentro y advirtió que las muertes pueden aumentar cuando se actualicen las cifras oficiales al cierre de esta semana.
Señaló igualmente que la mayor cantidad de los 103 internados a causa del virus está «en los dos extremos de la vida», con 16 pacientes menores de un año de edad y 60 mayores de 60 años.
El funcionario indicó que el 90 % de los contagios se registra en Asunción, la capital paraguaya, y el departamento de Central, los más poblados del país. En estas zonas, agregó, se ha detectado el 95 % de los criaderos del aedes aegypti, que además de chikunguña transmite enfermedades como el dengue, el zika y la fiebre amarilla.
En declaraciones a periodistas, Borba calificó de «preocupante la disposición final de la basura» en el país y consideró un «grave inconveniente» el manejo de los bienes en desuso, especialmente de electrodomésticos como aires acondicionados, refrigeradoras, entre otros.
El titular de Salud destacó la importancia de las campañas de comunicación para concienciar a la población, aunque admitió que «no es suficiente».
Por su parte, el director general de Vigilancia de la Salud, Guillermo Sequera, indicó que desde comienzos de octubre del año pasado (correspondiente a la semana epidemiológica 40) hasta la fecha se han confirmado más 18.000 casos de chikunguña.
De ese total, Sequera cifró en 10.000 los contagiados en las últimas tres semanas.