La mayoría de las víctimas de feminicidio en República Dominicana son mujeres jóvenes, en edad reproductiva. Es un problema que va en aumento no solo en este país, sino también en la región.
Durante los últimos cinco años, las mujeres entre 15 y 36 años fueron las que más fallecieron a causa de la violencia machista, de acuerdo a la última investigación del Observatorio Político Dominicano (OPD), de la Fundación Global Democracia y Desarrollo (Funglode).
Al conmemorarse este viernes el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, la entidad presentó un informe en que se detallan que desde 2016 hasta 2021, en el país 566 mujeres, adolescentes y niñas fueron víctimas de la violencia feminicida y que de estas, 449 se encontraban en el rango antes mencionado.
Es decir, este grupo concentra el 79.3 % del total de víctimas de feminicidios, que es definido como el asesinato de una mujer a manos de un hombre por machismo o misoginia.
El estudio, autoría de la investigadora Flor Batista Polo, destaca que si bien es cierto que los feminicidios pueden ocurrirle a cualquier persona de sexo femenino, en cualquier etapa de su vida, las mujeres jóvenes, en edad reproductiva y en su mayoría, con hijos menores de edad, fueron las más afectadas.
Mientras que el rango de edad de los agresores oscila entre los 26 a 47 años. La investigación destaca que los hombres que cometieron feminicidios durante el periodo antes mencionado fueron 558.
El estudio titulado «Feminicidios en República Dominicana durante 2021 y el primer semestre de 2022», precisa que de los 566 feminicidios registrados entre 2016 a 2021, la categoría que mayor cantidad de casos tuvo fue la de los íntimos, que acumuló el 78.6 %. A estos le continuaron los perpetrados por conocidos de la víctima o de sus familiares (8.1 %) y los ejecutados por desconocidos (6.4 %).
Los huérfanos
Las consecuencias de los feminicidios, no solo se traducen en muertes de mujeres. Hay otras víctimas que son invisibles: los hijos. El estudio destaca que uno de los grupos poblacionales más afectados por esta problemática es el de los hijos e hijas de víctimas y victimarios.
Durante el 2021, la cantidad de niñas, niños, adolescentes y adultos huérfanos por feminicidios e hijos de las víctimas que fueron registrados totalizó 92, precisa el documento.
“Las consecuencias físicas y emocionales que pueden generar estos hechos en los huérfanos son innumerables. Conforme lo planteado en algunos estudios acerca de la violencia doméstica, el efecto negativo que esta tiene es significativo y evidente en torno a la funcionalidad del menor. Si esto se compara con un niño que se desarrolla en un entorno no violento”, destaca.
El último año
Haciendo énfasis en el pasado año, la investigación publicada ayer reveló que durante el 2021 ocurrieron 80 feminicidios en el país, ocho casos más que 2020. Esto significa un incremento de un 11.1 % del total de estos crímenes registrados.
El estudio precisa además que respecto a estos decesos, en el 29.7% de los casos la víctima ya estaba separada del victimario. Asimismo, el 6.3% de las víctimas estaba embarazada, el 14.1% era de nacionalidad haitiana, italiana y canadiense. En el 51.6% de los casos se alegó como motivo principal del crimen los celos y la negativa de la víctima para retomar la relación o porque quería abandonar la relación
Los feminicidios en la región
En la región mueren cada año, aproximadamente, 5,023 mujeres, adolescentes y niñas víctimas de la violencia feminicida y de un sistema que no cuenta con las capacidades necesarias para contrarrestar la situación, precisa la investigación de la ODP.
Durante los últimos seis años, aproximadamente, 30,136 féminas en 20 Estados de la región perdieron la vida. Siendo los países con mayor cantidad de casos Brasil (7,030), México (5,227), Colombia (3,949). Guatemala (2,288), Honduras (2,044), El Salvador (1,751), Argentina (1,611), Venezuela (1,213), Chile (1,029) y Perú (845).
El informe destaca que estos 10 países concentran el 90% de los feminicidios registrados en el período indicado por las organizaciones de la sociedad civil que estudian el fenómeno y las instituciones policiales y judiciales que publican estadísticas acerca de esto.
La investigadora Flor Batista Polo manifestó que aunque la mayoría de los países latinoamericanos ya sancionan y reconocen el feminicidio como una figura penal, las estadísticas durante los últimos años demuestran que por sí solas las penas no son suficientes para tener un impacto considerable en la cantidad de féminas que anualmente mueren por este tipo de violencia.