Paul Sorvino, un imponente actor especializado en interpretar a ladrones y policías como Paulie Cicero en «Goodfellas» y el sargento de policía de Nueva York Phil Cerretta en «Law & Order», falleció este lunes a sus 83 años.
Su publicista Roger Neal dijo que murió durante la mañana de este lunes en Indiana por causas naturales.
“Nuestros corazones están rotos, nunca habrá otro Paul Sorvino, fue el amor de mi vida y uno de los mejores artistas que jamás haya aparecido en la pantalla y el escenario”, dijo su esposa, Dee Dee Sorvino, en un comunicado.
En sus más de 50 años de trayectoria, Sorvino fue un pilar en el cine y la televisión, interpretando a un comunista ítaloestadounidense en «Reds» de Warren Beatty, a Henry Kissinger en «Nixon» de Oliver Stone y al jefe de la mafia Eddie Valentine en «The Rocketeer».
A menudo decía que, si bien era mejor conocido por interpretar a gánsteres, sus verdaderas pasiones eran la poesía, la pintura y la ópera.
Nacido en Brooklyn en 1939 de una madre que enseñaba piano y un padre que era capataz en una fábrica de batas, Sorvino tuvo inclinaciones musicales desde muy joven y asistió a la American Musical and Dramatic Academy en Nueva York, donde se enamoró del teatro. Hizo su debut en Broadway en 1964 en «Bajour» y su debut cinematográfico en «¿Dónde está papá?» de Carl Reiner, en 1970.
Sorvino tuvo tres hijos de su primer matrimonio, incluido el actor ganador del Premio de la Academia Mira Sorvino. Cuando se enteró de que su hija había estado entre las mujeres supuestamente acosadas sexualmente y en la lista negra de Harvey Weinstein en medio del movimiento #MeToo, le dijo a TMZ que si hubiera sabido, Weinstein, “no estaría caminando. Estaría en una silla de ruedas”.