Muere Luis Ramón Cordero, gigante del deporte y la justicia dominicana

Luis Ramón Cordero, abogado, cronista deportivo y figura ampliamente reconocida en distintos ámbitos de la vida nacional, falleció este martes a los 95 años de edad.

Su muerte genera pesar en el mundo del deporte, el derecho y la comunicación, sectores en los que dejó una trayectoria sólida y un aporte significativo.

Nativo de La Vega y amante del béisbol desde temprana edad, Cordero desarrolló un vínculo profundo con este deporte. En una entrevista concedida años atrás, explicó que no pudo dedicarse a jugar profesionalmente porque “era muy flaquito y no tenía fuerzas”, aunque encontró la forma de integrarse al ambiente beisbolero gracias a su memoria prodigiosa para relatar cada encuentro.

A nivel profesional, ejerció la abogacía tras graduarse de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) en 1953. Su carrera pública incluyó funciones como fiscal en La Vega y en la provincia Duarte, miembro de la Junta Monetaria entre 1982 y 1986, responsable de la unidad de Compras y Licitaciones de la Junta Central Electoral, así como directivo de la Liga de Béisbol en el periodo 1984-1990, entidad que posteriormente llegó a presidir.

Más adelante, entre 1998 y 2002, formó parte de la Junta Central Electoral como juez titular, fortaleciendo su perfil como servidor público.

Su paso por los medios de comunicación también fue notable. Contribuyó con ideas, análisis y proyectos en periódicos como Listín Diario, Hoy, El Nacional y Última Hora, donde tuvo una participación activa en el desarrollo de sus secciones deportivas.

Durante las últimas tres décadas integró el Comité Permanente del Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano, desde donde contribuyó a resaltar y preservar la historia de las grandes figuras deportivas del país.

Según informó su familia, los restos de Luis Ramón Cordero fueron velados el miércoles 26 de noviembre en la Funeraria Blandino de la avenida Abraham Lincoln, y ese mismo día recibió sepultura en el Cementerio Puertas del Cielo.