El Ministerio Público interpuso un recurso de apelación ante la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional con el fin de impugnar la medida que otorgó libertad bajo fianza a los hermanos Antonio y Maribel Espaillat, señalados por su presunta responsabilidad en el colapso de la discoteca Jet Set ocurrido el pasado 8 de abril, tragedia que dejó 236 personas fallecidas.
En su apelación, el órgano persecutor solicita que se le imponga prisión preventiva por 18 meses a Antonio Espaillat, mientras que para su hermana Maribel Espaillat pide la medida de arresto domiciliario.
Wilson Camacho, titular de la Dirección de Persecución del Ministerio Público, argumentó que la decisión del tribunal no valoró adecuadamente la magnitud del impacto generado, tanto a nivel de las víctimas directas como de la sociedad en general. Enfatizó que más de 180 personas resultaron heridas y 130 niños quedaron huérfanos como consecuencia del colapso.
Camacho también resaltó que los imputados habrían antepuesto sus intereses económicos por encima de la seguridad de quienes acudieron al establecimiento.
Por su parte, el abogado Félix Portes Núñez, representante de 30 querellantes, elevó una solicitud ante la Corte de Apelación, pidiendo que se revoquen las medidas de coerción actuales y que se imponga prisión preventiva a los acusados.
El jurista cuestionó el fallo de la jueza, indicando que no se tomó en cuenta correctamente la figura del dolo eventual como base para determinar la responsabilidad penal de los imputados.