Santo Domingo. – Con el propósito de la conservación de flamencos del Caribe, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales lanzó la campaña “Rescate Rosado” en alianza con diferentes instituciones, para combatir la tenencia y captura ilegal de dicha especie en los estuarios, reintegrar a la vida silvestre a los que están en cautiverio, educar para la protección de sus hábitats y de sus poblaciones, ubicadas normalmente en lagunas salobres, costeras y salinas de toda la isla.
Para ello, el organismo ha diseñado un proyecto que consiste en rehabilitar alrededor de 200 flamencos localizados en cautiverio, con el objetivo de desincentivar su comercio.
El proyecto también contempla talleres de concientización en los lugares estratégicos, así como una gran campaña publicitaria que convoque a la protección de la especie.
La iniciativa de la entidad rectora de la gestión del medio ambiente y los recursos naturales de la nación nació de una propuesta de la sociedad civil, al percatarse de que había flamencos en cautiverio en hoteles del país y persigue, además, dar a conocer cómo proteger esas aves migratorias y explicar su importancia para mantener el equilibrio de los diferentes ecosistemas.
La entidad explicó que el procedimiento para la rehabilitación y reintegración de dicha especie consiste en retirar las aves de las instalaciones hoteleras con la asistencia de un equipo de técnicos del Ministerio, quienes las trasladarán hacia el zoológico, donde expertos las pondrán en un proceso de cuarentena, evaluación y entrenamiento para alimentación en vida silvestre y luego serán liberadas a su medio natural.
Sobre el flamenco rosado
El flamenco del Caribe, o rosado, como se conoce, designado con el nombre científico de Phoenicopterus ruber, es una especie migratoria que enfrenta amenazas por la pérdida de hábitat y el comercio de aves para el embelleciendo de ambientes.
Tiene una falsa apariencia de numeroso, pues se mueve en grandes bandos y su presencia está extendida en la costa de varios países de la región continental e insular del Caribe. Sin embargo, ya está considerada extirpada en Puerto Rico y actualmente puede considerarse reproductivamente muy vulnerable, lo que a mediano plazo presumiblemente la pone en situación de peligro. Se tiene conocimiento sobre la existencia de colonias reproductivas en Cuba, Venezuela, Bonaire, México, Las Bahamas, Colombia y República Dominicana.
En los estuarios se ha identificado la práctica de colocar una gran cantidad de trampas en las que no solo se atrapa esta, sino varias especies más de aves acuáticas. Apenas el 30 % de las aves, capturadas en estas trampas, llegan a ser vendidas o adquiridas por los lugares que luego las exhiben como adornos en jardines.
Esta especie utiliza lugares específicos para alimentarse, anidar, descansar o criar sus pollos. Tienden a concentrarse en sitios restringidos, lo cual aumenta la importancia de estos y su vulnerabilidad.
Es por eso por lo que el programa integral para la conservación del flamenco cuenta con una estrategia basada en tres componentes fundamentales: la reintegración de aves en cautiverio a los estuarios, entrenamientos específicos a los guardaparques y personal de protección, así como educación sobre la especie y su importancia en los ecosistemas donde habita.