La República Dominicana sigue avanzando en la implementación de su estricta política migratoria, centrada principalmente en la deportación de extranjeros en situación irregular. Esta medida se lleva a cabo mientras se preparan las condiciones para recibir a los migrantes dominicanos repatriados desde Estados Unidos.
Hasta el momento, más de 35,000 migrantes indocumentados han sido deportados, siendo el Vacacional de Haina el principal centro de despacho para estos casos. Esta continua ola de deportaciones ha generado preocupación entre las familias afectadas, quienes se acercan al centro en busca de información sobre sus seres queridos.
De los deportados, algunos logran regularizar su estatus migratorio, mientras que otros, más familiarizados con el proceso, tienen mayor confianza en su capacidad para regresar al país.
Perspectivas Legales sobre la Política Migratoria
Aunque la implementación de la política migratoria es un derecho soberano del Estado, ha generado ciertas inquietudes entre expertos legales. Carmen Herrera, abogada especializada en migración, subraya la importancia de que los procesos de deportación se ajusten a las normativas nacionales e internacionales.
Herrera también destaca que, aunque Haití y Estados Unidos son socios migratorios clave para la República Dominicana, las diferencias sociales, políticas y legales entre estos países exigen un enfoque individualizado en cada caso, cumpliendo con las regulaciones pertinentes para garantizar el trato adecuado a todos los migrantes involucrados.