Medida drástica: Cierre fronterizo y suspensión de visados para haitianos

El Gobierno de la República Dominicana anunció el lunes que cerrará la frontera por todos los pasos si no se detienen los trabajos de desviación del río Masacre para el jueves.

Homero Figueroa, el portavoz de la Presidencia, hizo esta declaración y también informó que se suspenderá la emisión de visados a ciudadanos haitianos hasta nuevo aviso.

Figueroa dijo que se mantendrá el cierre total de la frontera en Dajabón y, si el conflicto no se resuelve antes del jueves, se cerrará completamente la frontera para el comercio terrestre, marítimo y aéreo.

Según el funcionario, la información proporcionada por el servicio diplomático y los organismos de investigación del Estado indica que los trabajos de construcción son llevados a cabo de forma unilateral por particulares. Además, las autoridades haitianas han afirmado que no respaldan ni participan en el proyecto y han expresado en múltiples ocasiones su desacuerdo con su construcción. Según Figueroa, los promotores de esta obra son empresarios y políticos que buscan asegurar el suministro de agua con fines comerciales.

El Gobierno dominicano ha decidido reactivar la toma de la Aduana en el río Dajabón, en el inicio del canal La Vigía, como una medida a corto plazo para garantizar el abastecimiento de agua a los productores dominicanos. También se ha iniciado el proceso de construcción del proyecto de la presa Don Miguel como una solución definitiva a largo plazo. Se estima que la construcción llevará unos 30 meses y tendrá un costo aproximado de 2,700 millones de pesos.

Además, se solicitará una reunión bilateral de la mesa hídrica binacional para acordar una solución definitiva.

El Gobierno dominicano enfatizó su firmeza en la defensa de la Soberanía Nacional y la garantía de la Seguridad Nacional. Se destacó que las autoridades haitianas han reconocido en repetidas ocasiones que no tienen la capacidad para resolver conflictos internos debido a la pérdida del monopolio de la fuerza del Estado a manos de organizaciones criminales.

Se considera que este proyecto viola el artículo 10 del Tratado de Paz, Amistad y Arbitraje entre la República Dominicana y la República de Haití y se cree que es promovido por actores haitianos con la intención de perjudicar a su propio gobierno y generar un conflicto con la República Dominicana.