Están fritos, creen que por ser varones tienen alguna ventaja, cuán equivocados y lo peor es considerar que son superiores.
Mientras el macho se ampare en el convencimiento de que tiene el dominio, estará totalmente desenfocado de la realidad, porque la dura es la hembra.
Partamos de realidades incuestionables, tienen memoria de elefante, vista periférica y el denominado sexto sentido.
Esas son aptitudes arrolladoras y por demás están en un desacato total, por un margen estrecho, son mayoría, son más en la uni, emprenden negocios y desempeñan ocupaciones que antes eran exclusivas del varón.
Ellas saben si le gusta un tipo y hasta que están dispuestas a dar, el hombre tiene que ser muy inteligente y escrutador para saberlo y pocos lo son.
Una relación con una mujer es una tarea difícil y si hay intención de que sea prolongada mucho más compleja y si el objetivo es el matrimonio, adiós.
Tendré que buscar tranquilidad para escribir El Mujerologo, porque solo así podré entregar un material que sea vital para reeducar al machito criollo, mientras tanto, sepan que las mujeres, hoy más que nunca son verdaderas diablas!