Los restos de Franco abandonarán el Valle de los Caídos antes del 25 de octubre | España

Vicepresidenta interina Carmen Calvo, este viernes, después del Consejo de Ministros.



El Consejo de Ministros aprobó que la exhumación de Franco se ejecute antes del 25 de octubre, como anunció el viernes la vicepresidenta del Gobierno interino, Carmen Calvo. La intención del gobierno de Pedro Sánchez era que los restos del dictador abandonaran el Valle de los Caídos hacia el cementerio del Pardo-Mingorrubio antes de que comenzara la campaña electoral 10-N. "Hemos decidido tener un espacio de tiempo, que va desde hoy hasta el 25 de octubre, para tomar las decisiones técnicas y de seguridad que nos permitan exhumar e inhumar a Franco", dijo Calvo. El Valle de los Caídos estará cerrado al público a partir de este sábado, según fuentes del gobierno.

"Necesitamos días para cerrar el Valle de los Caídos, con las condiciones técnicas apropiadas", ha argumentado el vicepresidente para justificar el no dar una fecha cerrada para la exhumación. El Ejecutivo en funciones notificará a la familia del dictador con 48 horas de anticipación para que puedan asistir, si lo consideran apropiado, y la discreción correspondiente al tratamiento de los restos de una persona ha sido marcada. "Significa cerrar con dignidad lo que no era digno", agregó.

La Moncloa ya había avanzado mucho la operación para exhumar los restos del único dictador europeo enterrado en un mausoleo estatal bajo una enorme cruz visible desde varios kilómetros de distancia en una de las principales vías de acceso y salida a Madrid, la A-6. Hay mucho debate técnico sobre cómo sacarlos y especialmente sobre cómo trasladarlos a Mingorrubio, a 50 kilómetros del Valle de los Caídos. Incluso ha llegado a contemplar la posibilidad de hacerlo en helicóptero. "No descartamos ese medio de transporte en absoluto", dijo Calvo.

La operación contará con la presencia de un forense y el Ministro de Justicia, Dolores Delgado, participará en el proceso como notario mayor del Reino. Eso no implica que deba realizar ninguna experiencia, sino supervisar la operación en caso de que el ataúd no esté en buenas condiciones. Debajo de la lápida, de 1.500 kilos, hay una caja de zinc que puede costar abrir. Han pasado 44 años desde el funeral y una corriente de agua pasa por esa área. La intención del Ejecutivo, a excepción de los cambios de última hora, es que esta parte de la operación, que se llevará a cabo dentro de la cripta, se realice de manera reservada, sin la presencia de las cámaras, con algún tipo de pantalla o algo así. similar para que las imágenes se puedan tomar desde lejos.

La familia del dictador sigue tratando de detener la exhumación en la corte. El abogado de Franco presentó este jueves ante el Tribunal Constitucional un recurso contra la decisión del Supremo de dar paso libre a la transferencia de los restos. El escrito de 120 páginas solicitó que se adoptara la suspensión precautoria de la exhumación. El Supremo dictaminó por unanimidad que los restos serán exhumados y llevados al cementerio de Mingorrubio, donde ya descansan los restos de la esposa de Franco, y no a la catedral de La Almudena, donde están los de su hija. El tribunal superior presentó el jueves, a solicitud del Ejecutivo, la suspensión preventiva que mantenía en el plan del Gobierno y que había sido motivada por tres recursos (el de la comunidad benedictina del Valle de los Caídos, el Francisco Franco National Foundation y la Asociación para la Defensa del Valle de los Caídos) que aún estaban abiertas.

La Corte Suprema ha aclarado en al menos dos ocasiones que el Ejecutivo no necesita autorización para ingresar a la abadía y que la sentencia del 30 de septiembre con la que la Corte Suprema dio luz verde a la exhumación puede usarse como una conducta segura. También dictaminó que no había necesidad de un permiso de construcción para ese trabajo.

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