En el mes de enero fueron iniciados los trabajos de remodelación en el Paseo de la Lectura, como parte de la tercera etapa de las obras de reconstrucción y remozamiento de la avenida Duarte con París y sus alrededores, por parte de la Alcaldía del Distrito Nacional, los cuales representan uno de los centros económicos más importantes de la capital. Los módulos del Paseo de la Lectura y el Paseo de la Música, fueron inaugurados en 2008, y reúnen a alrededor de 50 puestos donde se venden libros, instrumentos musicales, entre otras mercancías, Los vendedores de estos establecimientos se mostraron conformes y agradecidos, y describieron que los trabajos de remodelación van “rápido”.
“Se está haciendo un trabajo, los módulos los van a remodelar mucho mejor, o sea antes teníamos unos módulos techados, pero teníamos que tapar, correr, muchas veces, uno hasta se da golpes para tapar corriendo para que no se le moje la mercancía pero ahora van ser pequeños locales”, expresó uno de los propietarios de los puestos en el Paseo de los Libros, quien pidió solo ser identificado con el nombre de su local, Silverio Libros.
Silverio Libros dijo que mientras es remodelado su local, se mantiene vendiendo sus libros “en cualquier ladito” y que las autoridades les dijeron que serían transferidos a sus nuevos locales en un lapso de 30 días, y que luego serían remodelados los establecimientos faltantes, puesto que los trabajos constan de dos etapas.
Proyecto a buen ritmo
“Le calcularon un mes pero por lo que yo veo va muy rápido”, dijo el propietario del puesto de libros.
Adrián Alexander, dueño de otro de los locales y quien lleva en el puesto desde que el Paseo de la Lectura fue inaugurado, dijo que “hasta donde yo lo estoy mirando, el proyecto lleva un buen ritmo”, no obstante prefiere esperar hasta que este esté finalizado, para poder “celebrar”.
“Todo va marchando bien”, expresó Eliseo Bautista quien trabaja en la Duarte desde 1993 y en el Paseo de la Música desde el año en que fue fundado, en el espacio, además de vender instrumentos como panderos y güiras, cuenta con Biblias en diferentes formatos y tamaños. También Lino Castillo, que ha vendido diferentes artículos en el mismo lugar desde 1982, expresó: “es algo bueno porque nos están acomodando mejor, como nosotros trabajamos en carretillas, con la cintura desbaratada, y ahí por lo menos uno va a dejar su mercancía, es como un módulo cerrado, que vamos a descansar un poco”.
Calle José Martí
Otros vendedores de frutas y hortalizas manifestaron que otros de los trabajos fueron iniciados en el lugar desde hace un mes, por lo que fueron trasladados a la calle José Martí, y aunque aún no les han dado con exactitud la fecha de su reubicación opinan que “está muy bien” el trabajo que se ha realizado.