La resistencia y la durabilidad del cemento lo han convertido en un material de construcción básico en todo el mundo, pero los ingenieros del Royal Melbourne Institute of Technology en Australia (RMIT) finalmente han encontrado una forma de fabricarlo a un costo más bajo, mediante el intercambio de algunos materiales reciclados.
Hacer hormigón es una receta bastante simple. Un agente aglutinante, que suele ser un material similar a una pasta llamado cemento portland, se mezcla con agua y agregados: una combinación de arena, rocas y grava. Ajustar la cantidad de los diversos ingredientes puede alterar las propiedades del hormigón, haciéndolo más fuerte o más liviano según sea necesario, pero algunos de los elementos en la lista de ingredientes, como piedras más grandes y grava, pueden aumentar el precio, particularmente en algunas partes del mundo donde esos materiales no siempre están disponibles.
Una forma de ayudar a reducir el costo de hacer hormigón es reemplazar el agregado con otros materiales, incluyendo neumáticos de caucho usados que se han triturado en pequeñas partículas. La idea mata dos pájaros de un tiro, ya que también es una forma inteligente de reciclar los millones de neumáticos desgastados que se retiran de los vehículos cada año. Pero hasta la fecha, los ingenieros solo han logrado crear hormigón que cumpla con los estándares de resistencia requeridos utilizando una combinación de rocas y caucho.
El problema, como plantearon los ingenieros de la Universidad RMIT en un artículo de investigación publicado recientemente, es que la alternativa de caucho tiene demasiados poros. Durante el proceso de mezcla inicial, el agua llena los poros de las partículas de caucho, pero cuando finalmente se seca y el agua se evapora, lo que queda son innumerables huecos y espacios entre el caucho y el cemento que lo rodea, lo que debilita la unión y reduce la resistencia y calidad del hormigón.
La solución para reemplazar todo el material agregado en el hormigón con neumáticos reciclados fue colocar los ingredientes húmedos en moldes de acero que comprimen la mezcla con presión para eliminar todos los poros de la goma. Después del secado, el hormigón resultante exhibió una unión mucho más fuerte entre el cemento endurecido y las partículas de caucho, lo que le dio un aumento del 97% en la resistencia a la compresión y un aumento del 20% en la resistencia a la tracción.
Eso es un gran aumento, pero aún no es suficiente para que el hormigón hecho a base de neumáticos se use como un elemento estructural confiable, por lo que los investigadores están buscando otras formas de reforzarlo y fortalecerlo aún más. Y si bien el nuevo enfoque puede aumentar los costos de fabricación, a la larga, aún debería ser una alternativa más rentable que el hormigón tradicional. Esto se debe a que, además de utilizar materiales de origen más baratos, da como resultado un material más liviano que es más fácil y económico de enviar y trasladar.