Leah Campos, nominada por el presidente Joe Biden para asumir el cargo de embajadora de Estados Unidos en la República Dominicana, aseguró este jueves durante su audiencia de confirmación ante el Senado que, si es ratificada, trabajará “incansablemente” para contrarrestar la influencia del Partido Comunista Chino tanto en territorio dominicano como en el resto de la región.
En su intervención ante los legisladores, Campos enfatizó que una de sus prioridades será fortalecer la colaboración con el Gobierno dominicano para detener la inmigración ilegal hacia Estados Unidos, así como respaldar los esfuerzos conjuntos en el combate al narcotráfico y a las redes de crimen organizado transnacional.
“Espero ser, si se confirma mi nombramiento, un defensor positivo del alejamiento de la influencia maligna de China en la República Dominicana”, manifestó Campos durante la sesión.
Sus declaraciones reflejan una línea de preocupación ya expresada por autoridades estadounidenses, entre ellos el senador Marco Rubio, quien en enero pasado advirtió sobre la creciente presencia de China en la región tras la ruptura de relaciones diplomáticas entre República Dominicana y Taiwán en 2018, decisión que abrió la puerta a una mayor inversión y acercamiento económico con el gigante asiático.
Campos también subrayó que, de ser confirmada, dará especial importancia al fortalecimiento de la seguridad fronteriza y a la lucha contra estructuras criminales que amenazan la estabilidad regional. Reiteró su disposición a apoyar programas bilaterales que refuercen la cooperación en materia de seguridad y gobernabilidad.