La economía de la NBA marcha bien, o al menos eso es lo que se entiende tras conocerse que el límite salarial vivirá un importante aumento de cara a la temporada 2023-24. Según informa Shams Charania de The Athletic, se proyecta que el tope salarial alcance para ese momento los 134 millones de dólares, lo cual supone un aumento de 10,4 millones respecto al que se tiene para la campaña que empieza en el mes de octubre. Así, y plenamente relacionado a esto, se empezaría a pagar impuesto de lujo a partir de los 162 millones.
Teniendo en cuenta que esto es una proyección, se podría dar el caso de que los ingresos fuesen mayores y el límite aumentara un poco más. Sin embargo, este nunca podría pasar de los 136 millones de dólares, ya que debido a las dificultades financieras provocadas por el COVID, se fijó en un 10% el máximo que podía subir desde 2022-23 hasta el próximo año. Lo esperado en estos momentos es un 8,4%; informa Bobby Marks de ESPN.
De cara a los siguientes años todo apunta a que el límite continuará aumentando. De cara al curso 2025-26 debería estar vigente un nuevo contrato televisivo que esperan duplique los 2,6 mil millones anuales que se obtienen actualmente. Esto llevaría a una estabilidad y salto económico que podría provocar un rápido crecimiento del tope.
Si nada cambia y todo continúa según lo estimado, parece improbable que haya problemas para cerrar el próximo convenio colectivo entre NBA y Sindicato de Jugadores. Estos últimos se llevan aproximadamente la mitad de los ingresos, por lo que tendría poco sentido que alguna de las partes frenase la bonanza que vive la competición provocando un lockout.