El país debe disminuir la desigualdad estableciendo políticas públicas que permitan aumentar el salario real de los trabajadores, es decir, los bienes y servicios que puedan adquirir con su salario nominal, así lo indicó el exministro de Energías y Minas, Antonio Isa Conde.
“Si se aumenta el ingreso de los más pobres y de la clase media, no hay dudas de que se fortalece el mercado. Disponernos a hacerlo es una responsabilidad de todos, principalmente del Gobierno y los sectores productores de riquezas”, afirmó.
Resaltó que aunque se ha disminuido la pobreza, no ha sido así con la desigualdad, la cual es considerada como clave para el desarrollo.
Sin embargo, indicó que los gobiernos históricamente no han podido establecer políticas públicas eficientes para lograr reducir la misma.
El también expresidente de la Asociación Nacional de Empresas e Industrias de Herrera (ANEIH), destacó que se debe mejorar la salud, la educación, el transporte, el agua potable, la electricidad, y reducir su costo, las cuales contribuyen al incremento de salario real. “Si tú le da el desayuno y la comida a un niño de una familia pobre, tú estás ayudando a que aumenten el salario real; si tú reduce el costo del transporte y lo mejora, eso ayuda al trabajo real”, puntualizó.
Resaltó que el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha calculado en una muestra de 156 países que si sube la participación de los pobres y la clase media en el ingreso total, la economía crece. Pero sí por el contrario, se incrementa la proporción de los más ricos, baja el crecimiento.
Asimismo expresó que en el caso dominicano se ha evidenciado que, cuando aumenta el crecimiento económico en un punto porcentual, se reduce la pobreza en 2.78 puntos.
Dijo que un punto porcentual menos en la tasa de desigualdad provoca una reducción de la pobreza en 5.19 puntos porcentuales, según cifras de la CEPAL y el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPyD).
“Eso significa que de haberse reducido la desigualdad en los mismos niveles en los que aumentó el ingreso durante los últimos seis años, la disminución de la pobreza monetaria hubiera sido al menos el doble de lo observado hasta 2021. Esos números es que la tasa de pobreza hubiese logrado caer en 9.5 puntos porcentuales en vez de 4.8”, explicó Conde en un coloquio con la prensa.
El presidente de ANEIH, Noel Ureña, expresó que hay que seguir incentivando el trabajo porque no hay país que salga de la pobreza sin educación y empleo. La delincuencia es originada por la falta de oportunidades.